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Estado español :: 15/02/2004

Sesenta razones para SÍ votar al Partido Popular

Javier Rodríguez
Dado que los rojos están resentidos y revueltos, y vuelven a poner en duda los fundamentos de nuestra civilización occidental y cristiana, una comisión de gente d

1. - El glorioso gobierno de España nos ha devuelto el honor patrio al volver a hacer la guerra al Moro en el Iraq. Para ello hemos contado con el apoyo de la Gran Bretaña y de sus antiguas colonias de ultramar. Las Naciones Unidas, resentidas por el resurgir del espíritu hispano, miran hacia otro lado avergonzadas.

2. - Al ínclito presidente del gobierno de nuestra nación, don José María Aznar, no le tembló la voz cuando dijo al pueblo que ponía su propia credibilidad como garantía de la presencia en el Iraq de armas de destrucción masiva. No fue mentira, como dicen los ateos, rojos, masones y judíos, sino clarividencia, pues vio nítidamente cómo las gloriosas armas hispanas (junto con las de sus aliados) entrarían en el susodicho país para destruirle masivamente.

3. - Un periodista, posiblemente a sueldo del Moro Juseín, llamado José Couso, fue eliminado de manera certera y limpia por nuestros gloriosos aliados de norteamérica. Los rojos y masones se escandalizan. ¿Qué hace el gobierno español? Por delicadeza hacia la familia, a la que dolería conocer las verdaderas actividades del citado periodista, calla.

4. - Hacía tiempo que Madrid no contaba con un delegado del gobierno como don Francisco Javier Ansuátegui. Haciendo gala de otros ínclitos Franciscos, como Pizarro o el mismísmo Franco, no tiembla su pulso cuando se trata de soltar a los antidisturbios para disolver a las turbas revolucionarias, compuestas en su mayoría por jóvenes masones asesinos turbiamente disfrazados de señoras de mediana edad. Él es el único que penetra su disfraz.

5. - Por alguna razón, los rojos se empeñan en que los impuestos directos (el IRPF) deben ser progresivos, es decir: el que más gana tiene que pagar mayor porcentaje. ¿¡Por qué!? Si más gana es porque su sangre es más noble y no está mezclada con la de moros y gitanos. Por suerte, nuestro gobierno se ha dado cuenta de la falacia y ha disminuido la progresividad de los impuestos.

6. - Al mismo tiempo, también en un audaz golpe de mano, el PP ha bajado los impuestos directos y subido los indirectos, que no hacen diferencias según la capacidad económica de los contribuyentes. ¡Qué narices! Encima de que los pobres nos afean el país, ¡no querrán que paguemos más impuestos que ellos! Mucho mejor los impuestos indirectos, que la leche y el pan lo pagamos todos.

7. - Al fin alguien pone en su sitio a los nacionalistas. Perdisteis la Guerra Civil, así que ¡jodeos! Sois la Antiespaña y el Anticristo. La línea de pensamiento del PP es formidable: "si coincides en tus ideas con los terroristas, es que tú también eres terrorista". Vamos a meter al trullo a todos los rojos de una puñetera vez.

8. - En las elecciones de mayo en la Comunidad de Madrid, el PP se ha beneficiado de la compra de dos diputados corruptos del PSOE. Y lo hemos hecho tan rematadamente bien que no hemos dejado ni una puñetera prueba. He aquí otra muestra del saber hacer del partido. Hemos impedido que la comisión de investigación utilizara documentos, hemos cambiado al fiscal anti-corrupción... ¡y nadie sospecha! Ni siquiera se plantean preguntarse "qui prodest?" ¿quién se beneficia? Son tan memos que no sé ni por qué nos planteamos escribir esto. No nos arrancarán del sillón ni con espátula.

9. - El delfín, don Mariano Rajoy, próximo caudillo de España, ha sido nombrado por el procedimiento más acorde con los ideales del partido: por designación directa y personal. Los rojos dicen "a dedo" de manera despreciativa. Nosotros, en cambio, sabemos valorar la democracia en su justa medida.

10. - El delfín visitó Cataluña para convencer a los empresarios, espina dorsal de la región, de que presionaran para que los masones de ERC no entraran en el gobierno. La táctica se empleó en otras ocasiones, como cuando se reunió a los empresarios chilenos para tramar el golpe contra Salvador Allende. Desafortunadamente, los tiempos ya no son los mismos. Los hombres no están hechos de la misma pasta.

11. - El secretario general del PP en Madrid, el señor Romero de Tajada, cobraba por sus altamente cualificados servicios en una humilde casa de fotocopias de la capital un sueldo misérrimo. ¿Lo hacía por ambición, como dicen los rojos? ¡Quiá! Por humildad, para saber cómo se siente el común del pueblo y apoyar sus demandas con más énfasis. Dicen que no pasaba por allí. ¿Pero cómo? ¿Es que es necesario que un profesional tan cualificado como el señor Romero de Tajada pase las horas en una tienducha? No tienen corazón.

12. - En ningún caso queda tan claro el liderazgo del gobierno español como en el del "Prestige". No se dudó en intentar enviar el barco a aguas lusas para que no manchase nuestras hermosas costas. Pero los portugueses, siempre celosos de la gloria española y de haber sido los segundones en América, amenazaron con un barco de guerra para que volviera. Y en el transcurso de esas maniobras fue cuando el barco se terminó de fastidiar. Ya sabíamos, desde la revolución judeo-masónica de los claveles, que nada bueno se puede esperar de ese pueblo.

13. - Con el único fin de no alarmar a la población, el gobierno español y el de la región gallega prohibieron hablar al Instituto Oceanográfico de La Coruña, lleno de comunistas deseosos de crear crispación social, del caso "Prestige". A pesar de todo se presentaron miles de rojos, maricones, terroristas y punquis a fastidiar con la excusa de "limpiar el chapapote". Alguno de nuestros hombres del partido habló claro y les quiso desenmascarar, afirmando que perdían más aceite del que recogían, pero la presión de la prensa antiespañola le convenció de que era mejor callar.

14. - La Organización Mundial del Comercio (OMC) que lucha por el libre tránsito de mercancías por el bien de la humanidad, está negociando el AGCS (Acuerdo General de Comercio de Servicios). Según este acuerdo el gobierno se vería obligado a liberalizar a medio plazo (y, por tanto, dejar de ofrecerlos de manera gratuita) servicios de educación, sanidad... Hay algunos que lo ven mal, pero la gente de orden nos estamos cansando de que nuestros impuestos paguen la sanidad y la educación de la plebe cuando nosotros no pisamos un hospital público ni hartos de vino.

15. - El susodicho AGCS además, nos terminará de resolver el problema de los salarios. Permite un modo de inmigración "temporal" para realizar trabajos en España, con condiciones laborales del país de origen. ¡Construir chalets en la Moraleja a costes de Senegal! ¡Dios! Es que lloro de la emoción...

16. - Por cierto que el gobierno se desgañita avisándonos de la invasión de moros, sudacas y demás que llega a nuestras costas. Ha advertido de la relación con el terrorismo internacional, como en el caso de los moros que tenían productos para hacer napalm casero disfrazados de productos de limpieza. Algunos jueces masones se empeñan en no ver la verdad y les han liberado dos veces por falta de pruebas. Por suerte, el número de jóvenes conscientes que tienen clara la supremacía de la raza hispánica se ha disparado. Que vengan, dicen estos jóvenes, pero no estarán seguros en nuestras calles. Y el gobierno, gracias a Dios, se da cuenta de lo necesario de sus servicios y mira para otro lado. Saben que hay que hacer que los pobres españoles, que no tienen ningún motivo de orgullo por su asquerosa vida, tengan alguien por debajo de ellos a quien poder odiar.

17. - La escuela pública es un nido de rojos. El gobierno, especialmente en la Comunidad de Madrid (Gallardón primero y ahora Aguirre), fomentan a cara descubierta la enseñanza privada subvencionada. Escuelas que, gestionadas por gente de los nuestros, reciben más dinero que las escuelas públicas. Los profesores de la privada no han pasado por pruebas de selección objetivas y por tanto cobran menos, como es lógico. ¡El negocio es redondo! Otra prueba de la genialidad y eficiencia del PP.

18. - La escuela privada subvencionada puede elegir, sobre todo en la Comunidad de Madrid, sus alumnos como lo desee. ¡Nos han jodío! No acogen, salvo raras excepciones, subnormales (que los rojos llaman "alumnado de integración"), moros o sudacas (que los rojos llaman "inmigrantes"), etc. Ya son muchos los padres españoles conscientes que envían a sus hijos a este tipo de escuelas para que no se tengan que mezclar con gente de razas inferiores.

19. - El PP es un partido como Dios manda, y paga a sus interventores en las mesas electorales. Los demás partidos son tan ruines e ilusos que esperan que la gente lo haga de manera altruista. Así hemos conseguido que, mientras que todas las mesas del país tienen interventor del PP, muchas no tengan de ningún otro partido. Y si somos los mejores, bueno y qué.

20. - Una de las jugadas maestras, que demuestra hasta qué punto el genio hispánico de Recesvinto, de Cortés y de Cánovas vive en nuestro partido, es la manera de hacer el recuento en la Comunidad de Madrid. Los distritos y municipios de derechas cuentan de manera mucho más lenta. Así nos es posible, en caso de necesidad, hacer el "mínimo pucherazo imprescindible", ya que en muchos de los colegios de esos distritos no hay interventor alguno de otros partidos.

21. - Esperanza Aguirre, condesa de la Comunidad de Madrid (es cierto que aún no lo es, ¡pero debería serlo en justicia!) planea un cambio de la ley electoral que pasó desapercibido en su discurso de investidura: distritos electorales de distintos tamaños, dando igual peso a municipios de población muy distinta, calculados para que jamás los rojos nos vuelvan a arrebatar el trono. ¡Ven con los que ganan! ¡Ven con el PP!

22. - Los rojos están siempre a vueltas con la monarquía. Son unos resentidos celosos que no ha podido tragar con que sus hijas no hayan sido elegidas por nuestro maravilloso príncipe. Dicen que se viola la igualdad ante la ley... ¡Amos, anda! ¡Si pusimos esa mariconada en la Constitución fue por darles gusto, no porque nos la creyéramos!

23. - La ciencia en España está contenida al peso que debe tener en una nación que es reserva de valores tradicionales y católicos. Un exceso de ciencia crea nidos de rojos, como la Junta para la Ampliación de Estudios, en la que el masón judío de Ramón y Cajal promovió la rebelión y la Antiespaña. Así es mejor. La España gloriosa no es la de la ciencia, sino la de los tercios de Flandes y los autos de fé. Al principio de la democracia los científicos se subieron a las barbas. Retornaron algunos exiliados a los que no echábamos de menos y se incrementó el gasto en ciencia. Pero ya vuelven a estar contenidos. Una década más y volveremos a los gloriosos tiempos de Felipe II.

24. - Y cuando se gasta dinero en ciencia, mejor hacerlo en proyectos grandes que demuestren que España, cuando así lo desea, es la mejor. Como por ejemplo, el Centro de Astrobiología (CAB), de Juan Pérez-Mercader, en el que el espíritu hispano está presente en grado sumo: se derrocha dinero a espuertas y el nivel científico es tremendamente bajo.

25. - Los precios de los pisos suben. ¡Puede! Pero aún así la gente los compra. ¿No es señal de que no será para tanto? Alguna vez que otra, hemos tenido que retocar los datos de esfuerzo económico para comprar una vivienda con el fin de no alarmar a la población. En el PP, todo se hace pensando en la gente. Algunos rojos dicen que si la gente sigue comprando vivienda no es porque no la vean cara, sino porque no hay más huevos. Nosotros decimos: ¿qué iba a hacer esa gente con todo el dinero que se ahorraría con una vivienda más barata? Seguro que gastarlo en pornografía y drogas. Así que es mejor que lo tengan los constructores, que lo destinan a fines sociales, como fomentar -de distintos modos y maneras- la victoria electoral del PP.

26. - Además, que no se quejen: los intereses están bajos como nunca. Siempre hay alarmistas que dicen que cuando suban nos vamos a ir todos al carajo. El PP quiere enviar desde aquí un mensaje de tranquilidad: cuando suban los intereses, el gobierno habilitará unas salas especiales en su sede de Génova para que aquellos afiliados a su partido a los que hayan desahuciado puedan pasar la noche a cubierto. Una muestra más de la grandeza de corazón de nuestro partido.

27. - Y, ¿qué decir de la televisión pública? Jamás estuvo tan cohesionada con el gobierno de España como lo está ahora. Ni una fisura, ni una discrepancia. España... ¡una! España... ¡grande! Ehm, perdón. Es que me emociono. Dicen que TVE oculta y tergiversa información. ¡Por Dios (por la patria y el rey)! El pueblo español tiene un corazón débil, no se le pueden dar determinadas emociones fuertes sin preparación. El gobierno es como un padre para su pueblo, y le evita tales sobresaltos. El señor Urdaci se desvive por la tranquilidad espiritual de los españoles, y por eso unos jueces masones le condenan a tener que decir "ce-ce-ó-ó" y mariconadas similares. Qué injusticia, Dios santo.

28. - Definitivamente, a nuestro presidente le gustan los niños.

29. - Y, ¿qué decir de su sentido del humor? A una periodista malintencionada que sugirió que su bigote (metáfora pilosa del de Franco, Hitler o el Káiser Federico Guillermo II) se debía a una parálisis de su labio superior, don José María replicó risueño y festivo con la posibilidad de darle un muerdo. ¡Qué jocoso!

30. - Por no hablar del gusto con el que casó a su hermosa hija en el marco incomparable del monasterio de San Lorenzo del Escorial, rememorando las pasadas glorias de España. Los medios de comunicación, TVE en cabeza, acallaron todo lo que fuera necesario para que tal evento brillara con luz propia.

31. - A tan magno evento acudieron como padrinos la flor y nata de la política europea: don Silvio Berlusconi, presidente de un partido llamado "Forza Italia!" (nombre de resonancias futbolísticas y bullangueras, como si dijéramos: "¡Alirón, alirón, España campeón!"), férreo defensor del buen pensar en casi todos los medios de comunicación italianos, conocido por sus maniobras sutiles que exploran los límites de la legalidad. Por supuesto, es fácil hacer tales exploraciones cuando eres tú quien pones los mojones de tan borrosa frontera. El novio era, además de alto cargo del PP, el hombre de confianza para los negocios de Berlusconi en España.

32. - El otro líder que brilló en el evento fue don Antonio Blair, el laborista más de derechas que ha conocido el Reino Unido (que ya no es la pérfida Albión). Es un hombre de honor imperturbable: jamás reconoce haber mentido. Es, asimismo, impasible políticamente: no le preocupa que sólo el 33% de los ingleses hayan votado en las últimas elecciones municipales. También es risueño hasta el punto de que el hecho de que se sospeche que su gobierno está detrás de un asesinato político (el del científico bocazas David Kelly) no enturbia su fascinante sonrisa.

33. - Los amigos del presidente forman un capítulo aparte. ¿Qué decir de don Juan de Villalonga, primer presidente de la telefónica privatizada? ¿Quién le iba a decir, cuando compartía pupitre con aquel niño del bigote, que un día iba a tener tan gran fortuna? ¿Y qué decir de Mas Canosa, además de destacar su generosidad a cambio de tan poco?

34. - Y, ¿cómo no emocionarse ante esa gran bandera que ha instalado nuestro ínclito ministro de Defensa en plaza de Madrid dedicada a uno de los mayores marinos que ha dado a luz el suelo patrio? Su gran espíritu le llevó a organizar un acto mensual de homenaje, que fue atacado por masones, judíos y comunistas.

35. - Al pan, pan; y al vino, vino. El único gobierno con huevos para llamar "vagos" a la cara de los parados ha sido el nuestro. Les dijimos: a buscar un trabajo, nada de comer la sopa boba. El que no trabaja es porque no quiere. Sin ir más lejos, nosotros mismos, cada vez que el paro nos amenaza, aparece algún alma caritativa que nos ofrece un cargo de consejero delegado o prebenda similar. Y, si no, siempre hay alguna casa de fotocopias que nos paga sin pasar por allí. ¡No debe ser tan difícil! Pero las mariconas de siempre se nos echaron encima y montaron una huelga general. Es una pena cómo han cambiado los tiempos. En la época gloriosa, un par de disparos al aire, un par de manifestantes muertos, y tos pa su casa.

36. - Hubo un juez justo en este país. Sólo uno: Gómez de Liaño. Supo a quién había que parar los pies: a judíos y masones. Era justo, pero algo memo y no hizo las cosas bien, así que acabó en la cárcel e inhabilitado. El mundo no tiene en cuenta las intenciones... Pero el gobierno, en su magnanimidad, organizó un indulto masivo de criminalillos menores y en él metió a nuestro héroe. Fue como los dos ladrones que acompañaban a Jesucristo, pero con unos ochocientos más.

37. - Volviendo a nuestro ínclito ministro de Defensa, miembro de La Obra por más señas. Se le acusó injustamente de negligencia en la muerte de sesenta militares españoles de vuelta de Afganistán. ¿Por qué iba él a querer la muerte de sus más gloriosos compatriotas? Se dijo que los aviones eran una mierda, el piloto estaba borracho... y que todo eso era por evitar gastos. ¡Encima! A ver: España es pobre, pero consciente de su alta misión de garante de la paz internacional. Pobres, pero honrados, suplimos con medios de mercadillo. ¿Es eso un delito?

38. - A continuación nos acusaron de haber comprado aviones para el presidente y para el ministro de defensa mucho más caros que en el mercado. Al doble de su precio, decían, siendo de segunda mano. Así es el español: gasta a manos llenas cuando invita a sus amigos. Y el gobierno es muy español. ¿No es motivo de orgullo para el pueblo ver reflejadas en su gobierno sus mejores características?

39. - Tantos eran los rojos maricones que objetaban o se hacían insumisos que al final tuvimos que acabar con el servicio militar, donde se hacían hombres los españoles siriviendo a la patria. ¿Se pueden creer que, a pesar de las grandes ventajas que proporciona la carrera militar nadie quiere entrar? Este país ha perdido su espíritu castrense. Si volvieran a invadirnos los moros, o los franceses, ¡¿quién nos defendería?! Menos mal que el gobierno sabe cuándo hay que gastar: un millón de pesetas por soldado reclutado en publicidad del ejército. Estuvo el país saturado de pósters monísimos, y en TVE y Antena 3 no hacían más que salir soldadas y soldados negritos para mostrar lo guais que somos.

40. - Volviendo a la tele: el pueblo español tiene la programación cultural que desea. Es cierto que el mismísimo presidente y el líder de la oposición murmuraron palabras de desagrado hacia los programas en los que sale el Dinio, la Tamara, la Berrocal... pero en el fondo comprenden que el alma del pueblo español es simple como el mecanismo de un chupete, y que es mejor que vea esas cosas y vote como siempre a que vea programas tipo "La Clave", piense y nos vayamos todos al garete.

41. - El otro día hubo un espectáculo lamentable en el parlamento, al que el PP fue el único que tuvo huevos de negar su aquiescencia. Se hizo un acto de homenaje a los represaliados tras la Cruzada Nacional. ¿Cómo es posible que se ponga en los altares a los que estuvieron luchando contra España, saboteadores materiales o espirituales, masones, rojos, judíos? Pero, ¿qué es esto? El caudillo tuvo cuarenta años de dura lucha contra ellos, y logró sacar el país adelante. Hubo que fusilar a más de cien mil una vez acabada la guerra, ¿y? Era el cáncer que había que extirpar para dejar crecer a la Nueva España. Sólo queda dignidad en nuestras filas. ¡Ãšnete! ¡No nos mires!

42. - La cortesía en el parlamento es de débiles y de niñitas. Aznar es el único que dice todo lo que piensa. Por eso le votamos todos, porque es claro. La mayoría de los humanos tiene un mecanismo de control de sus articulaciones verbales. Nuestro presidente carece de él. Hay quien dice que le fue extirpado junto con gran parte del cerebro el día que Fraga le hizo su sucesor. Pero no tienen pruebas.

43. - La ingeniería financiera del PP es admirable. Hemos modificado la medida del IPC para hacerlo aparecer mucho más bajo del real. En enero del 2002, cuando entró el euro en vigor, se contaron las "rebajas" en el IPC. En febrero, en cambio, la desaparición de las rebajas no se contó como un aumento. De esta manera, la rebaja general es ficticia. En realidad, la gente no se da cuenta de que no importa la manera de contar el IPC mientras sea siempre la misma. El truco de ir cambiando las reglas ¡es genial!

44. - La genialidad es aún mayor: el incremento de sueldo de los funcionarios, pensionistas, etc. está vinculado al IPC. Ni siquiera al valor real, sino sólo a la estimación gubernamental. Estas estimaciones son siempre optimistas, porque queremos lo mejor para España. Luego a los pensionistas les damos una limosna a final de año y le damos un bombo tremendo en la tele, aunque sólo les estamos compensando por la "subestimación" del IPC que se hizo al principio del año. A los funcionarios, ni eso, que son unos vagos y unos rojos. Deberíamos echarles a todos y sustituirles por plantas decorativas. El problema es que la mayoría de ellos trabajan en sanidad, educación, correos, policía... y la gente les ve útiles y todo.

45. - El PP, siempre sensible al infortunio que hace que algunas familias de bien y cristianas tengan hijos con deficiencia psíquica, ha decidido tener una cuota de vacantes a ellos destinadas en el gobierno. Es el caso de doña Ana de Palacio, sin ir más lejos. Y, según dicen algunos, incluso de nuestro mismísimo presidente. A corazón, no nos gana nadie.

46. - Esta política caritativa hacia los desfavorecidos intelectualmente la imita el gobierno de Norteamérica con denodado afán, situando en la cúspide de su poder a un pobre hombre que no sabe ni tan siquiera comer una galleta entera sin golpearse la cara. Exportamos, como en los gloriosos tiempos del Imperio Hispano, lo mejor de nuestro espíritu al otro lado del Océano.

47. - Nuestro partido, dando muestras de gran tolerancia hacia las formas de expresión artística, ha situado a una señora al frente de la Dirección General de la Mujer que ha editado un libro con el solemne título de "Todas Putas" donde se hace apología de la violación. Viene a ser como si el Delegado del Gobierno en las Provincias Vascongadas publicara una apología del terrorismo. Pero somos tan liberales y tan guais que no importa.

48. - El gobierno se desgañita advirtiendo del peligro del terrorismo internacional como el de las Torres Gemelas. No es que seamos tan tontos que no veamos que es el propio gobierno de EEUU el que está detrás de actos de tan notable maquiavelismo. Es que sabemos estar con los que ganan. ¡Cuando os llegan las migajas, como las contratas en Sudamérica, no os quejáis tanto, cabrones!

49. - ¡Ah! Y los del PP nunca nos corrompemos. A mentes lúcidas como las de mis oyentes no les intentaré convencer de la superior fibra moral del conservador sobre la del rojo masón anarquista. Hay una razón impepinable: nosotros ya llegamos ricos al gobierno. Mucho rojo llega al poder y es como poner a un hambriento de dependiente de una pastelería. Alguno, claro, cae. Entonces lanzamos a los perros de prensa a por él. Nosotros somos más sutiles. Una contrata aquí, una subvención allá... Por lo general, todo legal, y son muchísimos millones más. Lo extraño es cuando alguna vez, algún memo se deja pillar... ¡Deja de resistirte, Luke, y únete al poder del lado oscuro!

50. - ¡Qué coño! ¡Vestimos mejor! ¡Tenemos mejor gusto! ¡Somos más ricos! ¡Tenemos mejores casas y mejores coches! ¡Oeee, oe, oe oeeeee! ¡votaaaaal pepééééé!

51. - (¡Y sigue!) La Constitución y el PP. Es cierto que en su momento no nos convencía mucho, por eso tenemos el fervor de los conversos, que es mucho más radical e intransigente: Torquemada, que era judío converso, o las hordas Otomanas recién convertidas al Islam... Hemos pensado que debería escribirse en latín, a fin de que la gente no la pueda leer. Podría sacar muy malas ideas, como la democracia interna de los partidos, el derecho al trabajo o la vivienda, el estado laico...

52. - (¡Y sigue siguiendo!) ¿Debate público entre los miembros del partido? ¡¿Para qué?! Nadie sabe como nosotros poner sonrisas profidén en la tele y darnos puñaladas traperas por la espalda. Realmente, un partido que es capaz de contener a Gallardón, a Rato y a Aznar entre sus filas es un extraño partido, unido como por arte de magia. Nuestro cemento es el más irrompible: el amor al poder y a la pasta. ¡Y al que se vaya de la lengua, shrkkxxxxx!

53. - ¿Cuál es el partido que más apoya el deporte? Por supuesto, hablamos del deporte reposado que practica la gente de determinada edad y determinados recursos: el golf. En Valencia los campos de golf... ¡se mueren! ¡Insensibles! Y nosotros queremos llevar unos cuantos trillones de hectólitros de agua del Ebro (es decir, de catalanes, aragoneses y otra gente que no nos vota) para regar ese pobrecito césped que muere de sed.

54. - Cuando se produjo aquella confusión en torno a las vacas locas, teníamos de ministro al excelentísimo señor Arias Cañete. ¿A qué se dedicaba este señor? Pues era empresario ganadero, ¿qué mejor, para conocer el campo? Pero él no era de los que se embarrancan en detalles: vivía en la ciudad para no oler a choto. Y sus vacas, en un alarde de capacidad ahorrativa, se comían los cadáveres de otras (vamos, como en mátrix). Locas, locas... ¡qué término tan exagerado! Un poco alteradas, pero lo normal para los tiempos que corren.

55. - Y, ¿qué decir de la economía? ¡Va que-te-cagas! Los malintencionados dicen que la causa son meramente los bajos tipos de interés y que cuando suban nos vamos a ir todos al cañete. Bueno... todos, no. Algunos somos previsores y estamos forrando bien el riñón para cuando eso pase. ¿No lo hacen ustedes? Jueguen bien sus stock-options y dinamicen su cartera, ¡con lo fácil que es...! Ah, y otro consejo: inviertan en el extranjero.

56. - La gente no sabe qué hacer con el dinero. Lo gasta en tonterías. Mejor que lo tengan los empresarios, que son colegas y tienen asesores fiscales guais. Cualquier memo ve que el poder adquisitivo de alguien que trabaja por cuenta ajena no deja de bajar en picado desde que llegamos al poder. El redondeo del euro ha sido una idea realmente genial: aunque lo hicimos punible, fue de manera tan sutil que no hay ni un sólo caso en España de denuncias por ello.

57. - Y, hemos mantenido las ayudas de la Unión Europea hasta las elecciones. Somos los mejores. Ahora, con la entrada de los países de Europa del Este, no nos va a quedar ni un puto duro y nos daremos cuenta de hasta qué punto lo necesitábamos y nuestro boom económico no era más que un globo inflado. En lugar de estimular el consumo interno aumentando los salarios y disminuyendo el paro en condiciones, nos dedicamos a reunir lo que podamos del botín antes de que el barco se hunda. ¡Ãšnete a nosotros y quizás te dejemos un huequito en el bote salvavidas!

58. - ¿Quién más que el PP mira por el tipismo y el colorido del pueblo español? Los andaluces, pongamos por caso. Se empeñan en trabajar, progresar y ser europeos. No señor: vosotros al fandango y a los toros, que es lo vuestro. Por lo visto, les debemos unos durillos. Les decimos: os lo daremos sólo si ganamos. ¿Por qué? Porque si se lo damos y gobiernan otros, ¡seguro que pierden su grasssia y su duende, que no se pue'aguantá! Nosotros sabríamos administrárselo bien, es decir: dárselo a los señoritos para que lo gasten en esas vidas que se pegan a lo hermanos Álvarez Quintero... En Madrid había mogollón de andaluces en los tiempos de la oprobiosa... no, espera... del felipismo. Ahora tenemos uno, Javier "Campeón" Arenas, señorito hasta la médula. Ése sí que sabe tratar a los andaluces...

59. - El gobierno valora la conservación del planeta en su justa medida. Sin ir más lejos, nos vamos a salir del injustísimo protocolo de Kyoto, que impide a la atmósfera recibir el dióxido de carbono que tanto necesita para aumentar la temperatura global lo suficiente para deshacerse de la raza humana...

60. - Pero lo mejor que ha hecho el PP no es siquiera en economía. Lo mejor es el cambio en la gente. Cada día más peseteros, desilusionados en política, intolerantes, grises, racistas, anti-catalanes, anti-vascos, anti-andaluces... iracundos, retrógrados, nostálgicos, dictatoriales, opusinos, aterrados, estirados, insolidarios... Cada vez son más la España de charanga y pandereta, del "¡vivan las caenas!" y de la Corte de los Milagros. ¡Eso es un pueblo gobernable, puesto que es imposible que se ilusione con nada! Es un pueblo que, en las charlas de café, dice que todos los políticos son corruptos... y luego nos vota a nosotros. Una mayoría silenciosa adulada por casi todos los medios de comunicación, que la pintan como ahorrativa, prudente, madura, realista, sensata y que ahora viven bien tras haber pasado muchas penurias gracias a su propio esfuerzo. Les gusta verse retratados en el protagonista de "Cuéntame" (felices de vivir bajo un dictador), pero se parecen más a Torrente...

 

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