Todos y todas terroristas

Y así cantaba Eskorbuto en los 80, aquella mítica banda de punk-rock de Santurtzi, tuvo la clarividencia de la que carecían algunos sesudos analistas que se reclamaban del marxismo y que hoy día colaboran activamente en hacer realidad la predicción del grupo vasco.

Absolutamente todas y todos somos terroristas. Los que luchan contra Bolonia, las personas comprometidas con la autodeterminación de los pueblos, quienes reclaman un reparto justo de la riqueza, los que pensamos que los reyes a los cuentos, quienes queremos el final de las guerras de rapiña, l@s internacionalistas…. Y es cierto. Yo me enorgullezco de ser uno de ellos.

Somos terroristas y nos honramos de ello. Causamos pavor, terror, ( el que causa pavor, terror es el terrorista) a las clases dominantes, a l@s banquer@s, a los fascistas de toda la vida que no terminan de irse, a los profetas del capitalismo y de esta realidad “una grande y libre” que siguen tratando de imponer a vascos, catalanes, gallegos, castellanos, canarios etc.

Esa es nuestra razón de ser además, seguir causándoles pavor y terror, seguir estando aquí dignos y libres como Cuba, como el resto de pueblos que hace frente al imperialismo y recordándoles todos los días, que esa tontería del fin de la historia es falso, que siguen las espadas en alto, que la lucha continua y que seguimos aspirando a un orden nuevo, al socialismo y a una humanidad de hombres, mujeres y pueblos libres.

Para esta gente, para los fascistas disfrazados de demócratas, como estos rojillos de Catalunya que lanzan a los mozos a apalear a los jóvenes anti-Bolonia o como este gobierno de opereta que padecen los vascos de Nafarroa, los que no entramos por su aro constitucional somos terroristas.

No hace falta poner bombas ni realizar acciones armadas para ser catalogado de terrorista, ellos marcan por medio de sus falsimedias lo que es un ciudadano correcto y bien pensante y a todo aquel que se salga de lo políticamente correcto, inmediatamente le ponen la etiqueta de terrorista.

Hay que ser comprensivo con el sistema bancario y la patronal y para ellos nos aleccionan los UGTs y CCOOs, hay que entender la reconciliación nacional con su constitución de marras y para ello esta el PCE y sus IUs, hay que saber valorar las intervenciones imperialistas y para este fin están las o­nGs que nos hablan de ayudas humanitarias…y hasta aquí nos dejan jugar a la democracia, salte de ahí y pasas a ser un radical, un anti sistema a demonizar y un elemento peligroso para la sociedad.

Algún día habrá que pedirles cuentas a estos izquierdistas colaboradores del sistema capitalista-burgués español y que con su actitud son colaboradores necesarios en la implantación de este status cada vez más abiertamente fascista. Sin ellos no hubiese sido posible, que esto este llegando hasta donde lo esta haciendo. Y es que el atrevimiento de la derecha en volver a salir a la calle, a levantar cabeza y ganar día a día terreno, con la implantación de medidas cada vez mas impopulares y progresivo recorte de libertades, jamás hubiese sido posible con una izquierda consecuente, republicana ( pero de verdad, no de pose ) y que jugase sus cartas en la calle, con los sectores populares, en la defensa de las causas justas, entre ellas la de la autodeterminación ( pero no en papel, sino en la practica) y que hubiese sido punta de lanza de lucha y no bombero de peleas, como han hecho esta camarilla de sindicalistas y politiquillos que componen la izquierda plural española.

Y a eso estamos llegando. Al advenimiento de nuevo del fascismo, cada vez mas atrevido y con menos careta y además con el pedigrí demócrata que les conceden estos de la reconciliación nacional.

Al lorito, pues, amiguitos. Los vascos hace tiempo que somos terroristas para esta gente, porque cuestionamos su orden constitucional antidemocrático, y pronto las medidas fascistas que se han tomado contra Euskal Herria, al amparo de la lucha antiterrorista, serán también extendidas a multitud de organizaciones y colectivos, que luchan por otra realidad.

Algun@s cometeremos acciones terroristas como escribir, otros por movilizar a la clase obrera, otros terroristas lucharan por el euskera o el galego…habrá algún terrorista que sensibilice por cuestiones como Cuba, Palestina...todas y todos los que estemos en la pelea por un cambio radical y por acabar con el capitalismo o la independencia de nuestros pueblos, acabremos con el epíteto zahiriente de terrorista, que diria Marx.

El fascismo, ya no es una amenza, es una realidad cada vez más palpable y percibible y los que luchemos contra eso, aunque jamás hayamos visto una escopeta pajarera seremos terroristas. A mucha honra.

Kaosenlared