lahaine.org
Euskal Herria :: 30/08/2017

Con recuerdo admirado

Mikel Arizaleta

Gontzal Mendibil con su bello artículo en Gara musicó la vida y muerte de Satur Abón. Cuando la conocí acarreaba ya un pasado de chabolas en Ollargan, ensudado en generosidad personal y trabajo en equipo. Satur Abón destilaba solidaridad internacional y un cierto olor a humanidad de barrio, a empresa y colaboración con gente necesitada y sabor a mujer.
Se hizo querer, y hoy lloramos su ausencia.


¿Y qué decir? Cuenta Leon Tolstoi en “La muerte de Ivan Ilich”, que Ilich había estudiado en la Lógica de Kizevérter aquel silogismo de “Cayo es hombre, los hombres son mortales, luego Cayo es mortal”, algo que le pareció toda su vida correcto con relación a Cayo, pero no con relación a sí mismo. Él no era Cayo, ¿o sí? Agur.


Mikel Arizaleta

 

Este sitio web utiliza 'cookies'. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas 'cookies' y la aceptación de nuestra política de 'cookies'.
o

La Haine - Proyecto de desobediencia informativa, acción directa y revolución social

::  [ Acerca de La Haine ]    [ Nota legal ]    Creative Commons License ::

Principal