¡La crisis capitalista, que la paguen los ricos!

El año 2008 comenzó con varias noticias que dejaron claro el cariz que está tomando la crisis capitalista en el conjunto del Estado y las repercusiones que está teniendo
sobre la clase trabajadora del mundo entero. Una crisis económica y financiera, pero sobre todo, una crisis que afecta directamente a la clase obrera y a todos los sectores
populares. El año 2009 entra con previsiones aún peores y un aumento exponencial de la pobreza y la precariedad.

La juventud que en los últimos años ha visto como sus derechos laborales y sociales han empeorado día tras día, es la primera afectada por esta crisis capitalista. Además,
hay un incremento casi diario de los precios en productos básicos que está empobreciendo a sectores económicos que hasta ahora parecían estar vacunados contra ello. El aumento del paro juvenil en sectores clave de la economía es el primer síntoma de una situación que empeora a diario. Además, el drama de la temporalidad, los contratos vía ETT, el papel esclavizante de las mutuas de accidentes de trabajo y la complicidad de los dirigentes sindicales con las actuales medidas económicas dejan a la juventud en una situación muy débil que no tiene perspectiva de mejorar.

Los ataques al sector público que está llevando a cabo el Gobierno de Jose Luís Rodríguez Zapatero, mediante la privatización de empresas clave en el desarrollo
económico como las privatizaciones parciales de RENFE o AENA, o los recientes trasvases de fondos del Estado a los grandes bancos son una prueba más del papel
que juega el Gobierno del PSOE en esta crisis. Además, se están viviendo situaciones dramáticas en otros campos como la educación pública o la sanidad, que los diferentes gobiernos autonómicos, estén gobernados por el PP o por el PSOE, están empujando hacia su definitiva liquidación.

No hay otra salida: luchar.

Cada día nos llegan por los medios de comunicación noticias de nuevos despidos o amenazas de cierre patronal de empresas en perfectas condiciones de viabilidad. La
mal llamada "crisis de la automoción" encierra diferentes tácticas para vender al gran público y a los trabajadores que es necesario despedir obreros para mantener la producción. No es cierto. Empresas como SEAT, NISSAN o General Motors van a cerrar este año con beneficios muy grandes, solamente reducidos por un pequeño margen del 6% respecto al año anterior.

Las grandes corporaciones económicas y financieras pretenden hacer pagar a la juventud y a la clase trabajadora la crisis que ellos mismos han provocado siguiendo la lógica capitalista. Unas espectaculares cifras de ganancias en años anteriores indican claramente cuál es su objetivo: seguir maximizando los beneficios a costa de la pobreza y el paro de millones de personas.

El papel de la juventud en esta crisis

La juventud ha sido la primera víctima del actual modelo económico, pues viene sufriendo desde hace años el actual modelo de mercado y su supeditación a los
intereses del capital. Bajo diferentes formas legales, los llamados "agentes sociales" (Gobierno, patronal y las cúpulas de CCOO y UGT) han articulado diferentes formas
de explotación que dejan a la juventud sin un marco estructural de lucha y defensa de sus intereses como trabajadoras y trabajadores.

Contratos beca, falsos autónomos, contratación temporal, prácticas no remuneradas en empresas, etc. Todo ello sirve no solo para aumentar las ganancias empresariales
a costa de salarios, también es una escuela de futuro para las generaciones venideras: si quieres trabajo, tienes que someterte.

Este modelo ha tenido funestas consecuencias para la juventud: el casi nulo acceso a la vivienda, el paro, la elitización del modelo educativo y su mercantilización (LOE, Espacio Europeo de Educación Superior, etc), y sobre todo, la falta de alternativas de futuro que nos permita decidir sobre qué papel debemos jugar en todo este proceso. Se nos ha negado el futuro, y la única alternativa es luchar por él.

Nativa o extranjera, la misma clase obrera

Cada año, las condiciones de vida que las grandes potencias imperialistas imponen a los países que están bajo su control económico obligan a millones de jóvenes de todos los continentes a emigrar a zonas más prósperas del planeta. Los Estados que tradicionalmente les acogen siguen aplicando un criterio de mercado: mientras puedan explotarles podrán entrar, y cuando haya crisis, les expulsarán y culpabilizarán de los males económicos. Recientemente, la Unión Europea ha aprobado la Directiva de la Vergüenza, que facilita a los Estados la expulsión sin garantías de compañeras y compañeros inmigrantes. A esto se suma la tradicional restricción de derechos que este colectivo sufre en España, donde a partir de 2007 ha sido endurecida la política contra él, con deportaciones masivas, asesinatos probados y violaciones de los Derechos Humanos demostradas por diferentes instituciones internacionales.

Este sector de la clase obrera, la mayoría juventud, se juega la vida víctima de la pobreza que los países imperialistas han creado en sus zonas de origen. España tiene
en la actualidad uno de los regímenes más represivos en materia de inmigración de toda Europa, y va a más, dado que en los barrios obreros se están empezando a generalizar las redadas policiales contra inmigrantes.

Sin duda alguna, la inmigración trabajadora no es responsable de la crisis capitalista; es, al igual que el resto de la juventud y la clase trabajadora víctima de un modelo
económico que reduce su papel a moneda de cambio para unos determinados intereses económicos, y como tal, merece nuestra solidaridad y apoyo. Forma parte de nosotros.

Una semana de lucha, de agitación y de difusión

Los Colectivos de Jóvenes Comunistas lanzan esta semana de lucha con una perspectiva unitaria, donde podamos realizar junto a otras organizaciones y en todos
los territorios posibles, una semana de agitación y difusión en barrios obreros, institutos, universidades y polígonos industriales. Donde señalemos juntos a las
responsables directas de esta crisis: la patronal y las grandes corporaciones financieras.

Esta semana de lucha, junto a otras experiencias unitarias como la Campaña Estatal contra las 65 horas semanales, debe ser el primer paso que déla juventud organizada
ante la preparación de la próxima huelga general prevista para la primavera de 2009, que diferentes organizaciones y plataformas sindicales de base están trabajando. Hacemos un llamamiento a toda la juventud organizada a realizar toda una serie de acciones conjuntas en todos los territorios donde tengamos presencia, y un llamamiento a la juventud en general, trabajadora o no, afectada por la crisis capitalista, para que no dude en dejar claro que esta crisis no la va a pagar la clase obrera. La juventud construye su futuro luchando, y esta semana va a ser un primer paso para su demostración.

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