Colombia: Comienza el Paro nacional de 48 horas en respaldo a consulta popular


La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) junto a otros gremios y movimientos sociales de Colombia comenzaron este miércoles un paro nacional de 48 horas en respaldo a la consulta popular sobre la reforma laboral promovida por el Gobierno del presidente Gustavo Petro. El paro, con amplio seguimiento popular, permite que decenas de miles de personas se están concentrando a esta hora en plazas de muchas ciudades colombianas.
El presidente de la CUT, Fabio Arias, entrevistado por el corresponsal de teleSUR en Bogotá, Hernán Tobar, dijo que los intentos por aprobar dentro del Congreso la consulta popular para tener una reforma laboral en su beneficio no van a prosperar, debido a que la derecha es mayoría en esa instancia.
“Imposible, no va a prosperar, sirve para dejar una constancia política, que es importante”, indicó Arias sobre una iniciativa de ley sobre el tema introducida en el Senado por una legisladora del oficialista Pacto Histórico.
Tras señalar que la oligarquía quiere quitarle derechos a los trabajadores, Arias remarcó que por esto “se justifica aún más” la movilización de este 28 y 29 de mayo, “porque es un paro encaminado a rechazar y condenar estas decisiones de la oligarquía contra los trabajadores en el caso de la reforma laboral”.
En redes sociales se han informado los puntos del territorio colombiano donde hay concentraciones, centradas en Bogotá, la capital del país.
Se indicó que habrá cuatro cacerolazos generales en estos dos días, a las 12 del día y a las ocho de la noche.
El ejecutivo de la CUT, Nelson Alarcón, invitó en sus redes sociales “al pueblo trabajador colombiano a movilizarse pacíficamente este 28 y 29 de Mayo”.
“Denuncio a la administración de Bogotá por amenazas y descuentos contra docentes que quieren ejercer su derecho a la protesta”, mencionó el dirigente sindical.
Al respecto, el Departamento Administrativo de la Presidencia de la República informó que los trabajadores “tienen derecho a participar en la movilización del 28 y 29 de mayo sin temor a represalias. No puede haber descuentos salariales ni sanciones”.
----
¿Hacia una constituyente popular? Colombia se prepara para un paro nacional decisivo
"Llamo a toda la ciudadanía a la paz y la convivencia". Con estas palabras, el presidente Gustavo Petro marcó el tono frente al paro nacional convocado en Colombia para los días 28 y 29 de mayo, en respaldo a las reformas sociales de su Gobierno.
En medio de un escenario de alta polarización y bloqueo legislativo, líderes sindicales y sociales aseguran que las movilizaciones que se están desarrollando desde esta mañana buscan defender la dignidad laboral y abrir paso a una eventual constituyente si el Congreso mantiene su negativa a legislar en favor del pueblo.
Hernán Alonso Rúa, de la Junta de Colombia Humana en Venezuela, y John Jaime Posada, dirigente sindical y vocero del Sí de la Consulta Popular, ofrecieron su lectura. "Las marchas del 28 y 29 de mayo son convocadas por un espacio de convergencia de organizaciones sindicales, sociales, populares, étnicas, de mujeres, de jóvenes, estudiantes", señaló Rúa. Esta articulación nació en una cumbre realizada recientemente en la Universidad Pedagógica Nacional y tiene como eje central el respaldo a la reforma laboral del presidente Petro.
"Uno de los elementos claves de por qué se lucha por la reforma laboral tiene que ver con la tercerización y la desregulación de las relaciones laborales". Rúa explicó que buena parte de los trabajadores del sector público están hoy contratados bajo la modalidad de contratistas, lo que implica "la eliminación de derechos laborales básicos como prestaciones sociales, salud, seguridad social, estabilidad". La reforma propone acabar con estos llamados "contratos basura", que precarizan al trabajador y benefician al empleador. "Esta reforma pretende recuperar ese derecho a la estabilidad laboral y a la seguridad social, entre otros".
En la misma línea, Posada destacó que "esto es un Gobierno del cambio (...), del pueblo" y que la reforma laboral busca "recuperar la dignidad humana, para que haya contratos con estabilidad, para que haya horas extras pagadas, para que se paguen los dominicales". El especialista subrayó que "mucha de la juventud no conoce lo que es un contrato a término indefinido" y por eso considera justificado salir a marchar.
Luchar por el interés del pueblo
Los dirigentes hicieron énfasis en señalar que el Congreso está capturado por intereses económicos. Posada aseguró que "muchos de los hombres y mujeres que se presentan al Congreso son elegidos con dinero de empresarios nacionales e internacionales, para que voten en bloque en contra del pueblo que los eligió". Por eso estimó que las reformas podrían ser adoptadas por decreto presidencial.
"Es mentira que eso afecte la economía, porque los gobiernos anteriores tomaron estas decisiones, recortaron derechos, recortaron horas de trabajo y nunca generó más trabajo ni mejor trabajo", sentenció. Para Rúa, lo que vive hoy Colombia no se puede separar del contexto latinoamericano. "Estamos ante un bloqueo institucional. En Colombia hay una combinación de sabotaje económico, jurídico, legislativo. Es el mismo dilema histórico que enfrentaron los trabajadores cuando se luchó por las ocho horas de trabajo."
"En Colombia, parece que hubiéramos retrocedido a las cavernas en estas oscuras décadas neoliberales", y que la pelea de hoy es por "el salario, el tiempo de descanso, la salud". La coyuntura está marcada, agregó, por la proximidad de las elecciones presidenciales y legislativas. "Estas consultas y propuestas de reforma se están dando previo a una campaña electoral, lo que tiene en vilo a la derecha".
En paralelo a las movilizaciones en Colombia, el escenario político regional también se reconfigura tras la jornada electoral en Venezuela del 25 de mayo, en la que el chavismo gasnó por amplia diferencia 23 de las 24 gobernaciones y una mayoría abrumadora en la Asamblea Nacional.
Para los voceros consultados, este resultado refleja que "el pueblo venezolano sigue apostando por el proyecto bolivariano" y que "las fuerzas populares tienen capacidad de articulación y movilización frente a las amenazas externas e internas". El ejemplo venezolano puede servir de espejo para los movimientos sociales colombianos que buscan consolidar un modelo de transformación desde abajo.
Con movilizaciones en dos países claves de la región, el continente parece atravesar una etapa decisiva. Como subrayó Posada, "el poder constituyente está en el pueblo, y el protagonismo de los sectores populares se hace visible en las calles, en los cabildos y en las urnas".