Perú: Profetizando las secuelas mediáticas del paro del 7-8-9 de julio

“Gracias a los sin esperanza Nos es dada la esperanza”
Walter Benjamín

El pueblo peruano en todo su derecho de ejercer su reclamo frente a un gobierno que le saca la vuelta a sus imperiosas necesidades, expresará su voz de protesta este 9 de julio, realizando un paro nacional convocado por la central general de trabajadores del Perú (CGTP) contra la política de gobierno que responde sólo a intereses minoritarios y deja de lado al grueso poblacional víctima de una estructura evidenciada en la práctica gubernamental, tanto en el ámbito económico como en el social.

El paro exige la aprobación de la ley general del trabajo, el impuesto a la sobreganancia minera, la eliminación de intermediarios como las services, así como la derogatoria de los decretos 1015 y 994, los cuales mediante la argumentación de facilitar la aplicación del TLC en el país, posibilitará la disolución de las comunidades andinas y amazónicas, las cuales podrán ser vendidas al capital extranjero, mediante remate al mejor postor.

Los mineros paralizan desde el 08 de julio, exigiendo mejores condiciones laborales, libre desafiliación de las denominadas AFP, así como la exigencia de la libertad sindical, reposición de trabajadores despedidos, y la des-criminalización de las protestas. La zona de la amazonía para desde el lunes 07 de julio, efectuando una paralización de 72 horas, dirigido contra los decretos legislativos 1015, 1089, y 1090, por considerarlos sumamente dañinos contra los intereses de la amazonía, convirtiendo a la selva en simple producto a privatizar. En ayacucho pararán por la presencia de tropas norteamericanas que pretextan su presencia bajo ayuda humanitaria.

El pueblo reclama frente a un gobierno que respondiendo a los intereses del capital no protege sus propios recursos; el pueblo se levanta frente a un gobierno que es un títere de intereses ajenos a los nuestros y se caracteriza por un entreguismo incondicional ; el pueblo se levanta frente a un grupo de marionetas pertenecientes a la misma escuela circense del payaso ronald; y, mientras todo esto sucede, el ladrido gubernamental no hace otra cosa que expeler fetidez en cada aseveración frente al paro nacional, minimizando su convocatoria, y minimizando su alcance.

Considero no hay peor ofensa por parte de un gobierno, que minimizar y subestimar al pueblo; considerarlo bruto o cojudo, y creerse como gobernante “vivo” y pendejo, mientras la sociedad se organiza para refregarle en la cara al gobierno que el supuesto progreso y mejora en calidades son un mero espejismo digno de creer en alguien que simplemente no convive con las necesidades sociales y que mira despreciando al necesitado, pero se serviliza frente a los “patrones” que realmente gobiernan su pobre conciencia y accionar.

Marcharán por las calles miles de trabajadores, obreros, mineros, profesores; miles de comuneros también estarán luchando por sus derechos y en defensa de sus tierras; se harán presentes miles de estudiantes, sumando así mares humanos que tomarán las calles, exclamando su presencia y sus necesidades que son desatendidas e incumplidas por el estado. ¿Y el gobierno que dice al respecto?

El día 04 de julio, Alan García hizo referencia a que el paro era promovido por sólo unos cuantos personajes que estaban contra la marcha del país, calificando los intentos de protesta como simples “chillidos”; ese mismo día el uni-neuronal del premier Jorge del Castillo hizo referencia a que si el pueblo sale a marchar, lo hace no por convicción, sino por responder a intereses y motivaciones foráneas, así declaró que el paro era financiado desde Bolivia, inferencia inmediata elaborada en base a las declaraciones de Evo Morales apoyando el paro y rechazando la presencia de tropas del norte, que motivarían posteriormente la respuesta de García afirmando que esas declaraciones eran envidia pura, producto del gran crecimiento del país.

Del Castillo haría referencia el 05 de julio, en un debate radial emitido por radio Programas del Perú, y en donde debatía con Mario Huamán, secretario general de la CGTP, siguiendo las directrices de su jefe, que el paro era financiado desde fuera, no sólo por Bolivia, sino también por Venezuela, y que además la manipulación sería enorme frente a los asistentes, así los estudiantes que se hagan presentes lo harán simplemente por estar encandilados en el juego de los “revoltosos”.

Hizo referencia además a que las condiciones para un paro, “no tenían razón de ser,” porque todo marchaba bien, y siguiendo el guión del slogan gubernamental repetía la letanía de que el Perú avanza, y crece con justicia social. Es decir para Del Castillo los propulsores del paro lo hacen simplemente por joder, sin más ni más, no hay contradicciones ni condiciones objetivas que lo ameriten.

El paro es de los peruanos, y miles saldrán a protestar, conscientes de la situación crítica que vive el país, por culpa del sistema económico y la desidia de sus gobernantes; miles de personas harán escuchar su voz y realizarán paralizaciones como forma de hacerse sentir frente al desprecio del estado; sin embargo el 10 de julio muchas serán las versiones que a todo nivel y forma buscarán desacreditar y descalificar este acto legítimo de respuesta popular. No hay que ser muy pitonizo para avizorar que mediáticamente gracias a la prensa servil el gobierno dirá:

Que fueron simplemente unos cuantos revoltosos que financiados por quienes tienen envidia al progreso y avance del país buscaron alterar la paz y el orden. (Ya no se acuerda García que él mismo participó junto a su partido en un paro contra Alejandro Toledo, en donde se recuerda propinó una furibunda patada en el culo a un transeúnte que lo opacó unos segundos en su marcha con su bandera peruana, para que lo vean como ejemplo demócrata) Que se puede confirmar también la filtración de dinero proveniente de Venezuela y Bolivia para el paro que responde a intereses ajenos. Que el paro a su vez esconde en su seno ideologías peligrosas como la senderista o la emerretista, buscando simple violentismo o violencia por sí misma.

Se presentarán en los programas de contenido “político” a los “agraviados del paro,” personas en las calles esperando un transporte público, personas que se han quedado varadas por las carreteras, personas que han tenido que cerrar sus tiendas o negocios por los “violentistas”; pero seguro nadie dirá o hará mención porque se tiene llegar a este tipo de protestas para que el gobierno se digne a dialogar con los pobladores. Se enseña a presentar las ocurrencias pero no las explicaciones de las causas; así responden los medios de comunicación, con imágenes soportadas que opacan la razón y exaltan la imagen que no miente. Ahora tus ojos “ven la verdad”.

Se exigirá a los cuatro vientos que los responsables del paro, sean acusados por alterar el orden, y se buscará amedrentar a quienes lo apoyaron, buscando a su vez constantes represalias personales. El gobierno luego exhibirá spots publicitarios donde las “fuerzas del orden” luchan por la paz social, enfrentando a “unos cuantos revoltosos”. (Nótese que a pesar de minimizar el paro, se ha ordenado la salida de la fuerza militar para controlar a la población).

Para finalizar a pesar de todas las evidencias dirá que fue un fracaso y que más puede la gente “consciente” de que el “Perú avanza” frente a quienes protestan sin necesidad y por figurar. El último sábado García comentó que luego del 9 de julio, simplemente viene el día 10; que “no pasará nada”, que todo seguirá como siempre; y que más quisiera él, para seguir limosneando prebendas y lobbies.

En el pueblo está, como siempre, la posibilidad de darle un ejemplo histórico, de demostrarle que al pueblo no se le subestima, no se le ningunea, no se le insulta; que más bien se le respeta, porque históricamente el pueblo conoce de luchas, así como también de victorias, al pueblo no se le regala nada, el pueblo lo consigue por su propio esfuerzo. Saludos a los partícipes de las jornadas de lucha 7-8-9 de julio.

La Haine