La Liga Nacional Campesina (1926-1929)

Terminada la etapa armada de la Revolución mexicana, el movimiento campesino se propuso obtener la solución al problema agrario, y para ello fue indispensable agruparse sectorialmente y emprender las formas de lucha y organización de los pobres del campo: solicitud de reparto de latifundios y entrega de la tierra para crear ejidos y núcleos de población, tomas de haciendas, enfrentamientos con el Ejército, la policía y las guardias blancas, y, algo fundamental, la creación de comités agrarios.
Veracruz era una entidad con algunas condiciones que la hacían sobresalir en toda la República: un movimiento obrero relativamente fuerte y que abarcaba a petroleros, ferrocarrileros, textiles, portuarios y maestros; una importante tradición liberal, antimperialista y revolucionaria; experiencias pedagógicas avanzadas en la educación pública, y con representantes en el poder público del ala más avanzada de la Revolución mexicana. Tales condiciones permitieron la organización campesina de masas, antes que en otros estados. Así, del 18 al 23 de marzo de 1923 tuvo lugar el Congreso constituyente de la Liga de Comunidades Agrarias del Estado de Veracruz.