Manifestación contra la reforma laboral en Madrid: Empezar por algún lugar

Mil personas no son muchas para hacer frente a una reforma laboral, sin embargo Antonio, secretario de acción social de Madrid y Castilla la Mancha (CGT), declaró al término de la movilización que "para las fechas pre-navideñas en las que estamos, con un puente un tanto puñetero la semana pasada y sabiendo que nos meten zancadillas por todos lados, yo creo que la manifestación ha estado dimensionada para nuestras fuerzas. Ademas ha sido una marcha que supone un pistoletazo de salida, no es una meta a la que ya hemos llegado, por lo tanto yo la veo positiva".

Este sindicalista valoró la ausencia de Solidaridad Obrera y CNT, asegurando que "fueron invitados ambos sindicatos pero no han querido firmar la convocatoria por diversas razones. Nosotros respetamos los planteamientos de cada sindicato; siempre estamos abiertos a lograr objetivos lo más amplios posibles para movilizarnos porque creemos que hay que sumar fuerzas y multiplicar, no restar y dividir".

Juan Luis, portavoz de la Coordinadora Sindical de Madrid, afirmó por su parte que "esta movilización es muy importante porque es un primer paso en contra de una reforma laboral que está haciendose de manera clandestina. Sabemos que se están cociendo cosas muy graves para los trabajadores, con lo cual esto nos permite abrir el año 2006 con perspectivas de nuevas movilizaciones de carácter general".

En cuanto a la añorada recomposición de un movimiento obrero de clase y anticapitalista en el estado español, Juan Luis valoró que "se hizo un trabajo importante en Granada el dia 19 de noviembre, reuniéndonos unas 30 organizaciones sindicales de todo el estado y firmando un manifiesto unitario. Ese es un paso que se da sobre otros pasos ya dados anteriormente con la voluntad de no resignarnos a la crítica sin más, ni al gobierno ni a la patronal ni tampoco a los sindicatos que están colaborando con ellos. Por contra, nuestra voluntad firme es abrir una alternativa de clase que es la que hace falta en este país y que esta hundida y vendida por parte de CCOO y UGT, con lo cual ese manifiesto es un paso muy importante y durante el año 2006 creo que se irá consolidando este proceso. Creemos en la unidad con otros sindicatos de cualquier tipo de orientación, siempre que se enmarquen en una política de enfrentamiento con el neoliberalismo y sus consecuencias. Además debemos buscar la coincidencia con organizaciones sociales y partidos políticos que puedan estar también en esta onda, y con todo el movimiento contra la globalización capitalista. Hay que abrir un bloque amplio en ese sentido para defender los intereses de la gente menos pudiente, más trabajadora y más honesta".

No le falta razón al compañero de la Coordinadora Sindical de Madrid, sin embargo a mi juicio tal manifiesto se queda cojo sin la participación de CNT, el único entre los llamados "sindicatos de clase" que no se presenta a las elecciones sindicales ni participa en los comités de empresa por considerarlos herramientas de la patronal.

Con relación a eso, Juan Luis asegura que "CNT ha estado convocada a todas las reuniones que hemos hecho, porque tenemos esa posición y creo que es la que corresponde en este tiempo y en el futuro. Hay que abrir un bloque plural y amplio, pero de gente que se mueva. Por tanto yo espero que coincidamos con los compañeros de CNT en otras movilizaciones contra la reforma laboral".

En fin, son muchas las intenciones pero no siempre son óptimos los resultados. La huelga general del 20J de 2002 fue convocada por los sindicatos mayoritarios ante la presión de sus bases. Hoy las cúpulas burócratas intentan que esta nueva reforma se apruebe bajo cuerda mientras las bases, en su mayoría, duermen. Eso significa que la creación de un nuevo sindicalismo combativo, necesario hace ya mucho tiempo, es ahora nuestra única salvación ante esta nueva vuelta de tuerca neoliberal. El 14 de diciembre vimos que unos están en la calle, a sabiendas de su debilidad, porque creen que hay que empezar por algún lugar la lucha contra la reforma laboral. Otros no están pero de momento tampoco proponen alternativas a gran escala. Si algo está claro es que la reconstrucción del movimiento obrero de clase y anticapitalista ya ha empezado, pero será lenta, larga y no exenta de conflictos.

Por último, destacar que al final de la manifestación se recordó a los compañeros víctimas de la valla de la vergüenza en Ceuta y Melilla, con cantos de "nativa o extranjera, la misma clase obrera".

Fuente: Kaos en la Red