8 de marzo en construcción: Trabajadoras, feministas y revolucionarias

No es fácil para las mujeres anticapitalistas abrise paso en un movimiento feminista dominado por la socialdemocracia. Su debilidad política y organizativa les lleva a participar, como buenamente pueden, en el único espacio de masas existente: aquel que apenas pretende recordarnos que la desigualdad entre hombres y mujeres sigue siendo un problema sin resolver.

Los hombres, como personas beneficiadas directa o indirectamente del sistema patriarcal, siguen en su inmensa mayoría mirando hacia otro lado, más allá de su participación en estas coloridas movilizaciones. Las históricas cadenas que -conscientes o no- nos atan al patriarcado exigen de un proceso de transformación mucho más profundo. El papel que las mujeres atribuyen a los hombres en este campo de lucha sigue siendo un debate abierto, así como cuáles son las verdaderas raíces de este problema, su amplitud real y cómo combatirlo.

Ahora bien, el pasado 8 de marzo encontramos, entre Jacinto benavente y la ronda de Atocha, pequeñas ideas que rompen el discurso "feminista" del gobierno, deseos todavía sin frustrar que despejan el nublado cielo del feminismo combativo, rabia de las doblemente oprimidas y aislados embriones que, por encima de los obstáculos, nos enseñan que el feminismo (radical) empieza a estar en la calle.

Rocío, de la Eskalera Karakola, empezó rompiendo el hielo afirmando que "veo mucho hombre por aquí y no me gusta porque creo que este es un día para que la mujer se manifieste y para que el resto de mujeres nos vean manifestarnos. Además creo que deberíamos estar todos los dias saliendo a la calle, no sólo hoy".

Rosa, militante de Mujeres Rojas (Corriente Roja), subrayó que "hoy es el día internacional de la mujer trabajadora y por tanto nosotras tratamos de aportar una posición de rechazo a la reforma laboral, que atenta directamente contra las mujeres con los contratos a tiempo parcial, la precariedad , los contratos temporales..., y queremos darle el carácter que entendemos tiene que tener el 8 de marzo: no un dia en general de lucha de las mujeres sino un dia en particular de lucha de la mujer trabajadora. Mujeres Rojas estamos organizándonos para construir un espacio del feminismo combativo y anticapitalista, con un discurso diferente al discurso reformista que sólo utiliza buenas palabras, como se puede ver en todos los anteproyectos de leyes que estan aprobando ahora, sin un objetivo de ir al fondo de los problemas. Así no se resuelven los problemas de las mujeres y se está demostrando. Se demuestra con la ley contra la violencia de género, con la cual siguen muriendo mujeres; se demuestra con la ley de dependecia, la ley de igualdad..., muchas palabras y al final dejan a la mujer en la misma situación. Desgraciadamente el 8 de marzo siempre ha estado copado por ese 'feminismo en general’, y nosotras queremos darle el caracter de clase que tiene que tener, se trata de un feminismo revolucionario y socialista."

El colectivo Hetaira también estuvo presente en la marcha, bajo una pancarta "en defensa de los derechos de las putas". Cristina, su portavoz, aclaró que "reivindicamos los derechos para las prostitutas, que es un sector de mujeres que tiene un trabajo muy particular y que esta muy estigmatizado en la sociedad. Tenemos contradicciones con algunas organizaciones aquí presentes, pero nosotras somos feministas, de hecho yo llevo 30 años militando en el feminismo, y sabemos que algunos colectivos feministas no acaban de ver que esto puede ser un trabajo tan digno como otros. Además somos anticapitalistas; a la larga este sistema no nos gusta porque trae mucha discriminación, aunque de momento no vemos muy claro una alternativa diferente, por tanto estamos por mejorar las condiciones de vida y de trabajo hoy y aquí".

Por su parte, Laura, del sindicato anarquista CNT, declaró que "esta es una manifestación tomada por el feminismo burgués, pero creo que es importante que sigamos viniendo porque no debemos consentir que el feminismo se reduzca a este tipo de reivindicaciones que derivan en que si la mujer asciende o no, si la mujer tiene derecho a tener una chacha en su casa para poder ganar mas dinero... El problema es que se considera que la mujer no puede ser independiente, no sólo en el tema laboral sino también en el tema de la defensa personal. Se considera que ella es débil y no se puede defender. Está claro que las mujeres nos podemos defender perfectamente, al igual que podemos vivir perfectamente sin la necesidad de tener un hombre a nuestro lado que nos proteja y que nos saque las castañas del fuego. Realmente la manifestación del 8 de marzo se ha ido convirtiendo en algo festivo, pero en realidad la lucha está en el día a día y en los espacios de convivencia con los hombres. En esta lucha no hay por que avasallar a los hombres, pero sí hacerte valer".

Lola, también de CNT, seguró que "yo tengo 3 hombres en mi casa, no estoy en contra de ellos y ademas los llevo a mis espaldas. Yo lo que quiero es un día y un espacio que sea para mi, porque la historia siempre el hombre ha sido el protagonista. Lo mínimo que podemos hacer es un día de lucha, por eso para nosotras este es un dia de reivindicación de las mujeres que han luchado por la huelga general y la dignidad del trabajo."

Nerea, del Kolectivo Autónomo Adelante, recalcó que "queremos reivindicar un feminismo que a nuestro entender no tiene cobertura en muchos espacios de Madrid, como puede ser el feminismo anticapitalista que cuestione el sistema actual que mantiene a la mujer encargada de las tareas del hogar, de sustentar que el trabajador que necesita el capitalista para conseguir el máximo beneficio en la lógica del mercado, siga existiendo como tal y se siga reproduciendo. Apoyamos a todas las mujeres que reivindican sus derechos y luchan por ellos, pero también animamos a los hombres a que se impliquen en la lucha. Dentro del cuestionamiento del sistema capitalista, tenemos que intentar cuestionar también el rol del hombre en la sociedad, a quien se le ha enseñado a comportarse de manera opresora, por tanto plantear este cuestionamiento supone que los hombres participen de esa construcción, porque si no, por ejemplo en los ámbitos familiares, los hombres seguirán representando los roles que representan hoy. En cualquier caso el mensaje socialdemócrata aquí presente es: salir a la calle hoy y que los medios de comunicación dominados por el poder empiecen a dar la bola una semana antes sobre la situación de desigualdad en que se encuentra la mujer. Pero el resto del año la situación sigue igual, lo que demuestra que el trabajo de base no existe. Entonces nosotras venimos aquí para revindicar el día de la mujer pero cuando salgamos de esta manifestación, seguiremos cuestionando el sistema y trabajando desde la base, que es lo que hay que hacer. Y si compartimos este espacio es porque no podemos dejarle la calle a ellxs".

Fotos:
x Colectivo La Plataforma

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