Celebrado el acto de presentación de Comunistas de Castilla en Madrid

El sábado 18 de febrero tuvo lugar en el CSOJ “Atalaya” en el barrio de Vallecas el acto de presentación de nuestra organización en Madrid. La misma corrió a cargo de F. Herrero (Epi) y Celia R V, quienes desgranaron los tres pilares de la propuesta política de las comunistas castellanas: socialismo, independencia, feminismo de Clas

Independencia para construir una nación que tiene todo el derecho a constituirse como tal y construir un camino diferente al diseñado para las tierras castellanas por la oligarquía española y los caciques autonómicos. En ese proyecto las ciudades y pueblos de Madrid han de tener un papel esencial. La oligarquía española diseñó un centro de poder imperial, una ciudad deshumanizada, base de operaciones de multinacionales que explotan al Pueblo trabajador y esquilman nuestros recursos naturales, centro neurálgico del aparato legislativo-judicial y represivo del Estado español, guarida de un monarca heredado del franquismo…

Frente a ese Madrid centro del imperio, el otro Madrid: el de las ciudades, pueblos y barrios populares que siempre han presentado batalla al poder, el Madrid del batallón comunero, el Madrid del ¡No pasarán! Y ese Madrid histórico ha de formar parte de lo que siempre fue: tierra castellana, por más que el estado español con toda su corte, la haya ocupado.

“La amplitud y diversidad de estas tierras no pueden alumbrar otra cosa que una nación popular y socialista donde se respeten las diferencias, construyendo una demarcación administrativa comarcal más acorde con las relaciones socioeconómicas reales que con las caprichosas divisiones provinciales actuales”. No se trata de sustituir un poder centralista por otro, Castilla necesariamente tenderá a una organización confederal de las tierras castellanas”. Con estas palabras explicaron Celia y Epi el proyecto territorial de las comunistas castellanas.

Y ese proyecto de nación castellana necesariamente es un proyecto feminista, en contraposición a un Estado español que hunde sus raíces en una profunda y sólida alianza capitalista y patriarcal en la que la iglesia católica ha jugado un papel central.

“Hay que combatir la doble explotación que sufrimos las mujeres, de género y de clase, agravada además en nuestro caso por pertenecer a una nación oprimida, ninguneada y dividida por el estado capitalista y patriarcal español”. El futuro de Castilla es un futuro donde las mujeres jugaremos un papel decisivo, y donde debemos desterrar todo vestigio de machismo” señaló Celia.

Las ponentes criticaron también a esa izquierda que es incapaz de romper amarras con el españolismo. “Carrillo dijo una vez que pese a las diferencias de clase, había una cosa que nos unía: nuestra condición de españoles” señaló Epi,para añadir “las izquierdas españolas, incluso las que se dicen comunistas, no pueden despegarse de su españolidad, no entienden que España es un proyecto de una Clase social muy determinada, la que ganó la guerra en el año 1939, y no es posible por tanto una “España” de las clases populares. Eso es una entelequia que nos quieren vender aquellos que siguen viviendo muy bien del reparto del pastel institucional de la “democracia española”.

Después de las presentaciones se abrió un extenso debate con amplia participación entre las asistentes. De entre las intervenciones surgieron dudas, ideas y propuestas:

“Comunistas de Castilla es una organización joven, un proyecto en construcción. No pretendemos tener respuestas para todo, los proyectos sociales se hacen con la incorporación de personas que quieren un futuro diferente y están dispuestas a pelear por ello, y en ese sentido todas las propuestas son bienvenidas” señalaron las presentes.

Finalizó el acto con una llamada a participar activamente de la movilización feminista del 8 de marzo, combatiendo ese feminismo institucional burgués que quiere convertir una fecha tan señalada en un simple acto folclórico. Las comunistas castellanas apostamos por la huelga general feminista y de Clase y emplearemos todas nuestras fuerzas en ello.