Dame pan y llámame abertzandal

Desearíamos pasar página y no volver a repetirnos una vez más, pero la hábil manipulación mediática que en estos días se está tejiendo sobre el movimiento vecinal de Gamonal nos obliga por enésima vez a regresar sobre el ya manido asunto de los abertzandals Es triste reconocerlo, pero el su uso y abuso mediático de este tópico está siendo utilizado para arremeter contra unos vecinos que primero fueron tachados de terroristas, y ahora están siendo criminilazados por hacer sátira de ello.

Lo hemos repetido en infinidad de ocasiones y, a riesgo de abusar de la paciencia de nuestros lectores, volveremos a hacerlo cuantas veces sea necesario. Existe un tópico bastante extendido entre ciertos rotativos locales y foráneos que no deja de identificar las protestas de los vecinos de Gamonal con el mundo abertzale. Una dinámica que no recae en exclusiva sobre el movimiento vecinal de Gamonal y que, siguiendo criterios marcados desde el Ministerio de Interior, se hace extensiva a la totalidad de movimientos sociales que plantean sus críticas sobre los aspectos más variados de la realidad que nos rodea.

Desde la PAH, pasando por el 15M, hasta los más variopintos movimientos sociales contestatarios, han sido tachados desde las tribunas oficiales de ser una extensión más de ETA, o cuanto menos, de ser filoetarras. Una estrategia que no es nueva y que busca a toda costa identificar con ETA todo atisbo de protesta galvanizando de esta manera a la población en su contra.

Su utilización sobre las protestas de Gamonal no es nueva, como ya hemos señalado en anteriores ocasiones, y se remonta nada menos que al conflicto del parking de Eladio Perlado, hace casi ya una década.

Días después de las cargas policiales y enfrentamientos que se sucedieron en aquella jornada del 18 de agosto de 2005, las páginas de Diario de Burgos se vieron repletas de constantes alusiones a la presencia de radicales provenientes del País Vasco que habrían participado en las protestas vecinales. Una serie de afirmaciones que pueden verse recogidas en el artículo que los compañeros de Burgos-Dijital dedican al tema:


Como ya es sabido, ante tales afirmaciones la hilaridad y la sátira se hizo presente entre los vecinos del barrio generando un término como el de abertzandal. Hibrido en el que se dan cita la supuesta vestimenta habitual en Gamonal, el chándal, y las constantes referencias al mundo abertzale.

El conflicto del bulevar de enero de 2014 hizo que el habitual tópico volviera a repetirse ya que desde el propio Ministerio de Interior se llegó a formular la hipótesis de la presencia de “violentos itinerantes” que habrían actuado en las protestas contra el bulevar de Gamonal. Una teoría desmentida por los propios jueces al revelar la filiación de la totalidad de detenidos que tienen su residencia afincada en Burgos.

Sin embargo, el ciclo de charla explicativas emprendido por la Asamblea de Gamonal por los más variados rincones de nuestra geografía, fue aprovechado por determinados medios para aportar la prueba definitiva de la conexión de Gamonal con el mundo abertzale, que incluso veía como los vecinos de Gamonal se atrevían a darle lecciones.

Con todos estos antecedentes y en pleno carnaval, el disfraz de abertzandal ha sido uno de los más recurrentes. Se ha pretendido hacer una sátira de las constantes insinuaciones que, ya sea desde las instituciones estatales o locales y sus particulares voceros, han tildado a los vecinos de Gamonal de terroristas.

La guinda del pastel la puso las identificaciones por parte de cuatro patrullas de la Policía Nacional la pasada madrugada del viernes al sábado de dos jovenes que iban disfrazados de abertzandal, en un despliegue desmedido que daba a entender que ni siquiera se podía hacer sátira de las continuas descalificaciones.

Es posible que el disfraz elegido pudiera herir algunas sensibilidades, no lo pongo en duda. Pero, ¿no se ha herido también la sensibilidad de los vecinos de Gamonal al identificarlo con algo que no son? ¿No está también el Ayuntamiento de Burgos hiriendo la sensibilidad de miles de personas represaliadas por el franquismo al pretender dar cobijo a una exposición sobre un general golpista sobre cuya conciencia pesan miles de asesinatos como es Juan Yagüe?

El pasado martes 4 de marzo de 2014 el Grupo de Apoyo a los encausados de Gamonal hacía público un informe en el que se denunciaban arbitrariedades y brutalidad policial en las casi cincuenta detenciones efectuadas a raíz de las protestas contra el bulevar. Sin embargo, la portada de Diario de Burgos se habría con una imagen tomada de las redes sociales de la Asamblea de Gamonal sin citar la fuente, mala praxis para quien se dice un profesional de la comunicación, (nosotros también lo hacemos pero somos unos cutres blogueros y no cobramos por ello) en un intento más que manifiesto de desviar la atención de las revelaciones del extenso informe.

El problema ya no es la dinámica arbitraria y las agresiones policiales que se registraron en las detenciones, algunas de ellas sobre menores, ni siquiera el turbulento asunto del ático ilegal del alcalde de Burgos, Javier Lacalle. Lo importante es utilizar la sátira para tachar una vez más a Gamonal de ser ETA.

Insisto en el hecho de que la sátira pude resultar más que delicada para muchas personas y la Asamblea de Gamonal ya se ha expresado en este sentido, pero el periodista que redacta el artículo de hoy sobre la escenificación de los abertzandal da a entender que, con sus múltiples errores y manipulaciones, ni tan siquiera llega a transcribir de forma correcta la pancarta que desde hace semanas puede verse en la caseta de la Zona Cero, o no estaba presente y se lo han contado, o le han puesto sobre la mesa el guión de un artículo previamente redactado.

Cuando desde hace casi una década te han estado insultando, la sátira es la mejor de las opciones para sacudirte de encima un estigma y mandarlo de vuelta a quienes con tanto esmero lo han fabricado. De eso no hay duda, pero no debemos olvidar que cuando Raúl Briongos, actual redactor jefe de Diario de Burgos, tomó posesión de su actual cargo, el editor Antonio Miguel Méndez Pozo, al que siempre ha sido fiel desde aquella fecha, le sugirió al oído unas reveladoras palabras: “Espero tu lealtad, que hasta ahora he tenido, y esa lealtad tiene que florecer todas las mañanas. También deseo tu amistad. Aquí tienes los trastos y mata bien”

¿A quién se refería El Jefe con eso de matar? ¿Será procesado el editor de Diario de Burgos por conspiración para el asesinato?, qué tome nota la Audiencia Nacional.

Mata bien Briongos, a pesar de todas tus estocadas Gamonal es demasiado toro bravo y todavía te puede dar alguna cornada.