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Euskal Herria :: 24/02/2005

«CASO JARRAI-HAIKA-SEGI»: Salaberria atribuye esta vista oral a la impotencia del Estado ante el conflicto

Segi
El parlamentario y ex miembro de Jarrai Jon Salaberria atribuyó ayer este juicio a la «incapacidad» del Estado «para dar respuesta a un problema político que requiere de soluciones políticas. No es capaz de hacer desaparecer ciertas expresiones y por ello responsabiliza a una organización», declaró ante el tribunal.

El ex militante de Jarrai Jon Salaberria subrayó ayer ante el tribunal que juzga a 42 jóvenes vascos que «el Estado no es capaz de hacer desaparecer ciertas expresiones que se dan en la calle porque responden a una problemática. Y como no puede dar respuesta a un problema político que requiere de soluciones políticas responsabiliza a una organización juvenil, en este caso, a Jarrai-Haika-Segi. Pero estos chicos que tengo detrás y a un lado se dedican a trabajar con otros jóvenes», indicó al tribunal.

En su declaración en calidad de testigo solicitado por la Fiscalía ísu intención era hacerla en euskara pero habló en castellano a causa de los habituales problemas de traduccióní, el actual parlamentario de SAremarcó que «si por algo se caracterizaba Jarrai era por tomar sus propias decisiones. Nunca conocí ningún tipo de directriz por parte de KAS».

«Esquema erróneo»

Las preguntas del fiscal, Enrique Molina, iban encaminadas a tratar de establecer alguna conexión jerárquica entre KAS y Jarrai. Salaberria reiteró en varias ocasiones que ese esquema «es erróneo» y negó cualquier relación de dependencia. Explicó que la coordinadora KAS surgió a raíz del proceso de Burgos y promulgó «un programa de mínimos democráticos basados en el derecho a decidir de los vascos. A partir de ahí, planteó la defensa de esos mínimos. Jarrai depositaba sus aportaciones, pero era un trato de igual a igual».

Ante la insistencia de Molina, Salaberria resaltó que «es muy importante entender el concepto de "coordinadora". KAS era un marco de contrastes y no puede entenderse como un ente superior». El fiscal, entonces, sacó a relucir parte de las declaraciones que efectuó en dependencias de la Guardia Civil cuando fue detenido en 1995 acusado de «ser el responsable de comunicación de Jarrai y de coordinar a los "grupos Y" en Gipuzkoa».

«Una vez efectuadas, dejé claro ante el juez que habían sido absolutamente inducidas por la Guardia Civil. Fui sometido a diferentes sesiones de torturas, entre ellas me hicieron lo que se conoce como "la bolsa". Si observa íañadió el testigo dirigiéndose a Molinaí. la declaración está en dos partes. Entre la primera, hecha tras llevar tres días incomunicado, y la segunda sufrí una nueva sesión de torturas». Y concluyó que «la obsesión de la Guardia Civil era corroborar la tesis que usted plantea, es decir, que por parte de KAS había unas directrices. Esas declaraciones policiales son absolutamente falsas e inducidas».

Añadió que «la imputación de coordinación de "los grupos Y" ni siquiera fue el centro de los interrogatorios y me pusieron en libertad. La Audiencia Nacional me condenó a un año pese a que la petición fiscal era de siete años y, luego, el Tribunal Supremo me absolvió. Era la misma acusación que a estos jóvenes. Yo lo viví», recalcó.

«Problemáticas de la juventud»

Manifestó que la actividad diaria de Jarrai abordaba las problemáticas y preocupaciones de los jóvenes y, a modo de ejemplo, expuso la defensa y difusión de los derechos de los estudiantes, la organización de eventos culturales, la lucha contra el servicio militar...

«Llegó a ser una de las organizaciones juveniles más potentes, y en ciertos actos reunió hasta 15.000 jóvenes. Es eso lo que se oculta, que aunaba a miles y miles de personas. ¿Se imaginan si 15.000 jóvenes se dedicasen a la "violencia callejera"?», preguntó.

Sobre la relación entre Jarrai y HB, Salaberria destacó que «orgánica no había ninguna». «En su definición, HB era una unidad popular integrada por jóvenes, ecologistas... con perspectiva abertzale y de izquierdas. Nutría sus listas electorales de distintos ámbitos», ex- plicó a la sala.

Llegados a este punto, Molina se centró en por qué HB «dejaba sus sedes para reuniones». «Por su propia naturaleza, no tenía sedes ni locales cerrados. Eran abiertos a toda asociación que quisiera usarlos, en los que estuvieron multitud de organismos», explicó Salaberria.

A lo largo del intenso interrogatorio, Molina citó algunas de las declaraciones que el actual parlamentario y algunos portavoces de Jarrai realizaron hace diez años criticando a la Ertzaintza. Tales manifestaciones fueron coincidentes en el tiempo con un ataque a una dotación de la Policía autónomi- ca en Orereta, y Molina se valió de ellas para intentar establecer «una justificación» de lo ocurrido.

«Es incierto que estuviera justificando. La consecución de esos hechos no invalida a nadie para realizar una crítica política de la actuación represiva de la Ertzaintza. Me ha acusado», protestó. Molina aclaró que no lo hacía «por el momento».

Salaberria también destacó en su declaración que Jarrai «defendía una salida dialogada al conflicto. Ese era el camino que veía».

Retrasos por motivos varios y problemas de audición

Pese a que el lunes Alfonso Guevara dejó claró que si para las 10.00 no estaban allí los 23 presos la vista se suspendería, la sesión de ayer comenzó nuevamente con bastante retraso porque no se habían efectuado todos los traslados desde las prisiones madrileñas a la Audiencia Nacional. Ayer, la culpa fue de la nieve. Una vez iniciado el juicio, una de las secretarias se indispuso y tuvo que ausentarse, lo que motivó un receso. Y, al igual que en días anteriores, hubo problemas con los micrófonos. «O, el electricista no tiene ni idea o menuda avería es», señaló al respecto Guevara. -


«Los 15.000 pagaban y 15 cobraban», afirma Cerracín
MADRID. El abogado de la AVT se esmeró en realizar preguntas concretas para que el testigo respondiera «sí o no» y en cortar las explicaciones de Jon Salaberria. Esta actitud le valió la reprimenda del presidente del tribunal, Alfonso Guevara, que incluso le dijo «¿puede callarse ya? Las respuestas van dirigidas al tribunal, no a las partes. No corte al testigo, le prohibo hacerlo mientras no le conceda la palabra», ordenó.
En una de sus preguntas, Cerracín se interesó por la cantidad de liberados que tenía Jarrai. Salaberria contestó que no había una cifra predeterminada y que variaba en función de las actividades programadas ícomo la organización de un Topagune que reunía a 15.000 jóvenesí o que exigieran un «sobreesfuerzo». Como media, señaló que habría entre 15 ó 20 liberados. «O sea, que los 15.000 pagaban y 15 cobraban», extrajo como conclusión el abogado de la AVT. «¿Los que cobran nunca van a la cárcel y los que no cobran siempre van a la cárcel? Usted cobraba y el militante de base, no», alegó.

Movilizaciones por los jóvenes desde Astrabudua a Berlín
ASTRABUDUA.í Mañana a las 20.00 tendrá lugar en Astrabudua una marcha de apoyo a Aiboa Casares, que es juzgada en Madrid. Será silenciosa y, según se indicó en la presentación realizada ante unas 50 personas en el Consistorio de Erandio, en ella se espera a miembros de PNV, EA, EB, Erandioztarrak, LAB y ELA. En Berlín, grupos juveniles realizaron el pasado viernes una manifestación con lemas como «Euskal gazteria aurrera». Y hoy se anuncian protestas en las universidades.

Debate con Joseba Egibar durante una charla en Ibaeta
DONOSTIA.í Jóvenes que ves- tían camisetas por los derechos civiles y políticos como las que llevan los juzgados en la Audiencia Nacional interrumpieron ayer una charla del presidente del GBB del PNV, Joseba Egibar, en el campus de Ibaeta y le interpelaron sobre la posición jeltzale ante actuaciones de la Ertzaintza como «torturas, seguimientos o el montaje de los "grupos Y"». Según explicaron a GARA, se entabló un debate en el que Egibar negó responsabilidades del PNV en esas cuestiones.

Asumen un sabotaje en Barakaldo contra el juicio de Madrid
BARAKALDO.í Un comunicante anónimo ha reivindicado el lanzamiento de tres cócteles molotov contra la sede del PSE en Barakaldo el pasado 12 de enero, «además de un bote de pólvora que no conseguimos hacer estallar». En la reivindicación se alude al «seudojuicio»de Madrid, calificado de «puro teatro», y se recuerda que «estos jóvenes sufrieron torturas». Se citan también las últimas redadas y se concluye que «nuestra acción quiere ser también la denuncia de este episodio asqueroso».

Fuente:
http://www.gara.net/idatzia/20050224/art102957.php

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http://www.lahaine.org/b2lharticulo.php?p=5938&more=1&c=1

 

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