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El movimiento redskin
Los redskins se decantan claramente por reivindicar no sólo las raíces antifascistas y antirracistas del movimiento, sino que también añaden a estas reivindicaciones la justicia social y el internacionalismo.
En sus orígenes este movimiento se localiza en tres países concretos: Euskadi, Inglaterra y Francia.
En Euskadi, con Kortatu y toda la gente de su entorno, la "Kortatu Power", que eran redskins encargados de que no se colaran nazis en los conciertos. Kortatu fue la primera banda skinhead del Estado español, lo suyo era la sencillez y la honestidad musical. En 1983 sale su primer disco con influencia de los Clash y un sonido cercano al ska y al raggamuffin. El euskera fue ganando terreno al igual que el compromiso político, siempre tuvieron problemas con la censura.
Fue una banda comprometida hasta su disolución en 1989 cuyo objetivo era difundir la identidad de Euskadi como pueblo y como nación.
En Inglaterra, los Redskins eran una banda que combinaba su carrera musical con la militancia política. Ellos afirmaban que siempre habían existido los skinheads de izquierdas puesto que eran obreros.
Los sábados por la mañana se dedicaban a vender la publicación Socialist Worker, ya que todos sus miembros eran militantes del Socialist Workers Party (Trotskistas).
Sus entrevistas se convertían en furiosos debates políticos sobre las huelgas, las insurrecciones armadas y Lenin. Por todo ello los medios de comunicación eran hostiles y cínicos ante esta banda.
Pero no sólo sufrieron los ataques de los medios de comunicación, en una ocasión treinta boneheads del National Front reventaron un concierto agrediendo a miembros de la banda. Como represalia esa noche los skinheads antifascistas atacaron un bar de la extrema derecha. A partir de entonces todos los conciertos eran vigilados por redskins.
Las portadas de sus discos se inspiraban en el constructismo ruso. Fueron skins modernos inscritos en la tradición pero orientados al porvenir que dieron origen al movimiento redskin y más aires de rebeldía a la juventud skinhead.
El grupo Redskins decidió separarse debido a que "había un momento que la música era más importante que la política". En Francia, en torno al grupo Berurier Noir surgen diversas bandas de redskins como los Lenine Killers, Red Ants, Red Boys, Ducky Boys y Red Warriors.
Los Red Warriors tienen como objetivo cazar a los boneheads en la calle. Conseguían juntarse sesenta redskins que organizaban sus acciones para pillar por sorpresa a los nazis y evitaban tener problemas con la policía asegurando sus coartadas de antemano.
Todos sus miembros practicaban deportes de combate y también utilizaban armas para enfrentarse con los grupos nazis más conocidos en Francia.
También organizaron la seguridad de muchos conciertos como en los de Kortatu, Berurier Noir, y en la fiesta del periódico comunista L'Humanité.
Sus miembros tenían distintas ideologías de izquierdas pero ninguno iba a permitir la dominación de la derecha, por eso buscaron los medios necesarios para luchar contra ella. Debido a que los argumentos políticos contra los nazis eran inútiles, eligieron la acción directa como forma de lucha.
