lahaine.org
Euskal Herria :: 03/03/2004

¿Quien dijo muera la inteligencia?

Mikel Korta (Askapena)
Análisis sobre la declaración de cese de la activbidad armada por parte de ETA en Catalunya

¿QUIEN DIJO MUERA LA INTELIGENCIA?

Creo que fué el fascista Millán-Astray, pero parecen haberle salido multitud de alumnos aventajados. Asisto entre alucinado y cabreado a las reacciones habidas tras el anuncio por parte de ETA del cese de su actividad armada en Catalunya.

Alucinado porque cada vez que uno considera que su capacidad de asombro ha tocado techo se producen declaraciones y actitudes que le demuestran que el nivel de estupidez y podredumbre moral, intelectual y material de los profesionales de la poltrona no tiene límites.

Cabreado porque se hace muy difícil de tragar que aquellos que tanto hablan de Paz, derechos humanos, soluciones de diálogo, .... deformen de tal manera la realidad que la convierten en irreconocible y desde esas premisas buscar soluciones razonadas y justas es simplemente imposible. Mentiras y más mentiras, falsedades sobre falsedades, discursos políticos que más tienen que ver con guiones con vocación de culebrón que con fórmulas para avanzar desde la razón, el sentido común y la justicia.

El comunicado emitido por ETA, la posterior entrevista publicada en Gara y las reacciones que le han seguido han servido para poner sobre la mesa verdades que han dejado al descubierto las enormes mentiras sobre las que se asienta el discurso y la actuación de esos que se llaman así mismo "demócratas".

Cinco han sido desde mi punto de vista las verdades como puños que han quedado evidenciadas para todo aquél que no mire la realidad con gafas de madera, o lo que es lo mismo, desde el obtuso prisma de quienes fabrican la realidad publicada.

La primera la centralidad política que la organización ETA ha tenido y tiene como agente político. Si la imposición del concepto de "terrorismo" para deslegitimar la rebeldía ha pretendido siempre cerrar las puertas al análisis racional y justificar la represión más brutal, lo ocurrido los últimos días no sólo ha demostrado el carácter político de ETA, sino la referencialidad de la misma como actor indispensable en la propuesta y búsqueda de soluciones. ETA ha obligado a poner encima de la mesa la esencia misma del actual marco jurídico-político y las posiciones de las diversas fuerzas políticas ante el mismo. Curiosa capacidad de incidencia política para un agente al que desde Ibarretxe a Aznar le niegan ese carácter. Seguirán tratando de imponer represión y más represión, pero ha quedado claro que otros caminos no sólo son posibles, sino que siguen estando ahí y que andarlos es simplemente cuestión de voluntad política. Precisamente la que falta a tanto "demócrata de diseño"

La segunda verdad, el cese de la actividad armada por parte de ETA en Catalunya, descubre otra gran mentira.Es rotundamente falso que para la clase política vasco-española el "Derecho a la vida" sea el valor supremo que guía su actividad. Y ello sin necesidad de mirar Irak, Afghanistan o a lo ocurrido en los Balcanes por citar solo algunos ejemplos. Se ha demostrado que esa gran mentira sólo les sirve para intentar cerrar las puertas al análisis del por qué de la existencia de personas que utilizan la lucha armada como instrumento de acción política, de personas dispuestas a matar y/o morir en defensa de unos ideales. Para eso y para justificar la represión más brutal, incluso hasta la muerte. ¿Cómo es posible si no la condena de una declaración que significa que ETA no va a atentar en Catalunya contra la vida de las personas? Todos, absolutamente todos han quedado con el culo al aire y hoy es más que evidente que el manoseado derecho a la vida como valor supremo no es más que un recurso para adornar el discurso y que quienes así lo conciben y utilizan mienten cada vez que así hablan. Como señalaba Haro Tecglen en El País "hablo como ciudadano universal, no como súbdito. Y atónito, porque oigo decir algo que equivale a esto: "Matad también en Catalunya, que son españoles".

La tercera verdad tiene que ver con el valor que algun@s dan al diálogo. El diálogo sólo sirve si se da sin exclusiones, desde el respeto a todas las ideas y con el ánimo de encontrar soluciones. ¿desde qué prisma puede entonces nadie que defienda el diálogo condenar el hecho de que Carod Rovira se haya entrevistado con ETA? ¿Desde que perspectiva puede condenar nadie que se trate de llegar a un acuerdo a través del diálogo? ¿Para qué sirve el diálogo si no es para llegar a acuerdos? Quienes critican la existencia del mero encuentro hasta quienes lo que condenan es que en el mismo se pudiese haber alcanzado un acuerdo, pasando por quienes lo califican como "error político", todos, absolutamente todos lo que realmente están condenando es el diálogo. Demuestran en definitiva que su recurso al diálogo, al igual que ocurre con el derecho a la vida no es más que una pose, una gran mentira para adornar su discurso. Y todo ello lo digo desde la negación por parte de ETA y del propio Carod-Rovira de la existencia de dicho acuerdo. Simplemente lo saco a colación para señalar que de haber existido dicho acuerdo debiera de haber servido para que Carod Rovira en lugar de ser atacado fuese sacado a hombros del Parlament por todos los que defienden el diálogo y la Paz.

La cuarta mentira tiene que ver específicamente con aquellos que se proclaman nacionalistas y debiera de preocupar y mucho a quienes sintiendose abertzales siguen alimentando la bolsa electoral de partidos como PNV, EA, Aralar, ... Es entendible que desde el imperialismo español se critique primero que Carod Rovira haya tratado de buscar soluciones relativas a Catalunya exclusivamente o que se critique la tregua por estar referida únicamente a Catalunya. Es entendible y coherente que esa crítica proceda de quienes consideran Catalunya junto con Euskal Herria, Galiza y otros, PARTE DE SU TERRITORIO NACIONAL y por tanto sujeto a la soberanía gestionada por el Gobierno español.A Aznar y Zapatero se les podría decir que si se les critica la falta de solidaridad para con los Pueblos del Mundo no es porque desde sus posiciones pretendan como prioridad la defensa de los intereses de lo que consideran su País, es decir, los "intereses de España". Nadie les critica que no exijan el cese de la ocupación y agresión contra Palestina, Irak o Chechenia como necesidad o condición previa para llegar acuerdos que traten de garantizar que el estado español no se convierta en escenario para esas confrontaciones. Se les podría decir que defender la paz en el mundo no quiere decir renunciar a buscar la Paz y la estabilidad en "sú España" y que de eso y no de otra cosa es de lo que están acusando a Carod Rovira. Su delito parece haber sido defender lo que él considera los intereses de su País, que no es otro que Catalunya. Pero como digo esas críticas son lógicas desde la mentadilidad imperialista española.

Lo que resulta sin embargo una enorme contradicción es que esa misma crítica proceda de quienes supuestamente defienden la soberanía de los Pueblos frente a la imposición española. Más aún cuando lo que está en el centro del conflicto aquí y en catalunya es precisamente eso la lucha por la recuperación de la soberanía para ambos Pueblos. Hoy mismo aparecía en EITB el vice-consejero de pesca del Gobierno vascongado reivindicando orgulloso el derecho de su Consejería a negociar con terceros países acuerdos de pesca al márgen o por encima de la voluntad española. Qué pasa entonces, ¿que se reclama soberanía para defender la gestión de determinadas parcelas de la economía y se niega esa soberanía para buscar acuerdos en algo tan básico como es la búsqueda de la paz? Las declaraciones de Ibarretxe, Josu Jon, Garaikoetxea, Patxi Zabaleta, ... negando a Carod Rovira y a Catalunya la soberanía necesaria para la búsqueda de un acuerdo que garantice que su país no sea marco de la confrontación Euskal Herria-Estado español, muestran como mínimo la falta de solidez de sus supuestos planteamientos soberanistas. Simplemente piensan como españoles. Sólo así se puede entender la coincidencia de sus tésis con las mantenidas por Aznar y Rodriguez Zapatero. Por eso y también porque lo ocurrido en Catalunya evidencia más aún su absoluta falta de capacidad política para avanzar hacia escenarios que sirvan para colocar en parámetros de confrontación pacífica la lucha de Euskal Herria hacia su propia soberanía.

Sólo nos queda confiar en el sentido común de la gente de a pié para descubrir la hipocresía, falsedad y falta de escrúpulos de una clase política que antepone la defensa de sus poltronas a la defensa de una sociedad normalizada en la que las relaciones entre los Pueblos se basen en la igualdad, la justicia y el respeto mutuo. Porque la solidaridad sólo puede darse desde la libertad y entre iguales.

Confiemos en el sentido común de las gentes para romper la paradoja que representa que la noticia de Catalunya sea festejada en los cuarteles, comisarías y también por much@s políticos en la intimidad, mientras es hipócritamente repudiada en las tribunas que ofrecen los grandes medios de comunicación.

El 14 de Marzo será un buen día para comprobar si esa confianza se ve correspondida.

Mikel Korta. Ezker Abertzaleko kidea

 

Este sitio web utiliza 'cookies'. Si continúas navegando estás dando tu consentimiento para la aceptación de las mencionadas 'cookies' y la aceptación de nuestra política de 'cookies'.
o

La Haine - Proyecto de desobediencia informativa, acción directa y revolución social

::  [ Acerca de La Haine ]    [ Nota legal ]    Creative Commons License ::

Principal