Colombia: Comunidades campesinas rebaten a presidente Uribe

Tatiana Félix - En respuesta al discurso del presidente de Colombia, Álvaro Uribe, durante la instalación del nuevo Congreso de la República, el último martes (20), las comunidades de Curvaradó y Jiguamiandó, en Chocó, divulgaron ayer (22) una carta en la cual denuncian que el gobierno ha beneficiado a los empresarios; y reclaman la no restitución de las tierras ocupadas ilegalmente con palma aceitera en sus territorios.

En el discurso del martes, Uribe hizo un balance de su gobierno y, refiriéndose a estas comunidades, afirmó que "se dieron procesos ejemplares de restitución de derecho de dominio". La declaración causó indignación a los pobladores de las localidades, quienes acusaron al presidente de dudar de sus palabras, al "afirmar que los empresarios portaban títulos legales de nuestras tierras, lo que indicaba ser ellos los dueños, y no nosotros".

"La respuesta de su gobierno, señor presidente, hizo con que nosotros intentásemos probar que éramos los dueños ancestrales y legales y, efectivamente, gracias a las denuncias y acciones, que desencadenaron amenazas y nuevos asesinatos, alcanzamos en derecho lo que el gobierno nos quería negar", rebaten.

Las comunidades conquistaron sus derechos territoriales cuando la Corte Constitucional emitió dos autos, el 18 de mayo de este año, reconociendo que el 93% de la palma aceitera está sembrada dentro de sus territorios. Según relatan las comunidades, la fiscalización adelantó algunas acciones en las cuales queda demostrado que fue idea de empresarios paramilitares sembrar la palma en estas tierras.

A pesar de los actos de desmovilización paramilitar, las comunidades denuncian que "el paramilitarismo, con nuevos nombres y nuevas formas de actuación, se mantiene en los territorios con la complicidad de las brigadas 15 y 17 del Ejército, favoreciendo a los intereses de los empresarios bananeros, la crianza de animales y la palma aceitera".

Al final de la carta, las comunidades hacen recordar que el gobierno financió a las plantaciones de palma aceitera e, a pesar de todas las demostraciones de derecho, defendió la oleaginosa, en diversos eventos con empresarios, como indicada a la producción de agrocombustibles en Curvaradó y Jiguamiandó. Las comunidades resaltan que mismo en medio del conflicto armado seguirán exigiendo sus derechos a la verdad, justicia y a la reparación integral de los daños.