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Europa :: 31/08/2006

Suecia: El grupo "Intifada Global" deja un artefacto incendiario junto al Ministerio de Defensa para denunciar el comercio de armas con Israel

La Haine.
:: "Si podemos quemar coches, podemos quemar el mito de la paz social" :: Es la novena acción de esta red de activistas, que forma parte del movimiento autónomo sueco. Un movimiento que no fue derrotado en la cumbre europea del 2001 en Gotemburgo y que ante la degradación progresiva del llamado "estado de bienestar", el acercamiento a la política imperialista estadounidense y la complicidad de la izquierda parlamentaria, sigue aglutinando a jóvenes con un alto grado de conciencia política.

Una amplia zona de Östermalm (Estocolmo) fue acordonada el pasado lunes, después de que un artefacto incendiario fuera encontrado por la policía. El grupo de izquierda anticapitalista "Intifada Global" reivindicó estar tras la acción. "Este grupo envió un comunicado de prensa donde aseguraban haber dejado un artefacto junto al Ministerio de Defensa y que la amenaza respondía a la política de venta de armas", aseguró Kjell Lindgren, portavoz de prensa de la policía de Estocolmo.

El artefacto no llegó a explotar

Hacia las 16 horas del pasado lunes 28 de agosto, el personal del Departamento de Materiales del Ministerio de Defensa (DMD) encontró un artefacto sospechoso muy cerca de la entrada, en una papelera en la calle Barnér. La policía acordonó rápidamente desde la calle Värta hasta Valhalla. Varios locales del DMD fueron desalojados a la espera de los Tedax, que poco después constataron que en la papelera había un artefacto compuesto por dos botellas con líquido altamente inflamable en su interior.

Horas antes el mismo lunes, el grupo de izquierda anticapitalista "Intifada Global" envio un comunicado de prensa a varios medios de comunicación, donde señalaban que habían colocado un "artefacto incendiario" junto al edificio del DMD, y que la "advertencia" respondía a que esta institución "compra activamente armas y equipo militar a Israel".

La policía desacordonó la zona hacia las 19 horas, una vez que el artefacto fuera colocado en un carro especial para transporte de bombas y llevado al departamento técnico de Rosersberg para ser analizado.

Novena acción del grupo "Intifada Global"

Hasta ahora el grupo Intifada Global ha llevado a cabo 9 acciones en Suecia. La primera ocurrió en septiembre del año pasado, cuando la embajada danesa fue atacada (por su participación en la política imperialista en Oriente Medio) con huevos de pintura y piedras, provocando la rotura de los cristales de las ventanas.

El pasado mes de octubre el objetivo fue la empreas de armas "Aimpoint" en la ciudad de Malmö. Así mismo, el grupo rompió cristales y arrojó huevos de pintura en la fachada del edificio. En un comunicado de prensa, Intifada Global aclaró que el motivo fue que esta empresa ha vendido armas a EEUU "durante la invasión de EEUU a Irak".

Las últimas tres acciones han sido llevadas a cabo con bombas incendiarias. Fuera de las embajadas tanto de Polonia como de Rusia, fueron quemados coches diplomáticos daneses.

Ahora las autoridades danesas han informado que la policía está investigando si esta red de activistas se encuentra tras una acción "de mayor gravedad’: el pasado 8 de junio, desconocidos arrojaron un coctel molotov contra el coche del Ministro de Integración danés (de ideología ultraderechista) Rikke Hvilshöj, junto a su casa en la localidad de Greve. El coche fue reducido a cenizas y el incendio obligó a la familia del ministro a ser evacuada de la casa en plena noche.

En un e-mail enviado a la prensa danesa, un grupo denominado "Beatas Sin Fronteras" reivindicó la acción. La policía danesa ha declarado a través de la prensa burguesa que "cree" que este grupo "tiene contacto" con la red sueca Intifada Global por utilizar métodos similares. Los servicios secretos suecos no han desmentido tales informaciones, simplemente han asegurado que "estamos en estrecho contacto con los cuerpos de seguridad daneses", en palabras de Jakob Larsson.

"Si podemos quemar coches, podemos quemar el mito de la paz social"

En internet, Intifada Global tiene su propia página web, donde presentan su lema "Si podemos quemar coches, podemos quemar el mito de la paz social". Intifada Global se define como "una red de grupos e individuos", que luchan contra "el orden capitalista e imperialista mundial". La red reivindica el uso de todas las herramientas de lucha: "mejor una piedra en la mano, antes que quedarse de brazos cruzados".

La prensa sueca ha tachado a este grupo de "terrorista" en multitud de ocasiones, citando argumentos del historiador conservador Anders Bergman, de la universidad de Estocolmo, que se ha "especializado en analizar el terrorismo de izquierdas". Según este personaje, "está claro que Intifada Global se inspira en grupos armados como la RAF alemana o las Brigadas Rojas italianas de los años 70".

Así mismo, Dagens Nyheter y Sydsvenskan, entre otros periódicos de la prensa sueca, aseguran que "los jóvenes que forman parte de esta red, son los mismos que realizaron disturbios y acciones violentas durante la cumbre europea de Gotemburgo en 2001". Además, relacionan a este grupo con la sección sueca de Acción AntiFascista, organización autónoma muy activa desde hace años en la lucha contra los grupos de extrema derecha suecos, a los que considera "instrumentos del capitalismo".

La prensa criminaliza, pero las redes juveniles anticapitalistas continuan vivas a pesar de la represión estatal y la pasividad de las autoridades frente al crecimiento de la ultraderecha, que ya empieza a tener concejales en varios ayuntamientos. La liquidación del llamado "estado de bienestar" también está llegando a Suecia ante la pasividad de la izquierda parlamentaria. En la cumbre de Gotemburgo de 2001, el movimiento autónomo puso en jaque a las fuerzas represivas, realizando barricadas y atacando infraestructuras capitalistas en todo el centro comercial de la ciudad. La policía respondió con una represión salvaje que dejó 80 heridos, tres de ellos de bala. El gobierno encarceló durante cerca de 3 años a medio centenar de manifestantes tras juicios políticos, y la izquierda parlamentaria calló.

Con todo, la resistencia ha continuado creciendo. La degradación de la izquierda tradicional, unido al retroceso de conquistas obreras históricas (avalandas por el sindicalismo oficial) y al progresivo coqueteo del gobierno con la política imperialista de EEUU, comienza a abrir un nuevo panorama de lucha.

 

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