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Mundo, James Petras :: 03/02/2016

Diez años de paternalismo han debilitado a las clases populares en Argentina

James Petras - La Haine
Durante el kirchnerismo, las reformas y las mejoras que consiguieron los trabajadores vinieron de arriba, no vinieron de la lucha, de la movilización de abajo

Análisis de James Petras en CX36, lunes 1 de febrero de 2016. Escuchar: http://www.ivoox.com/analisis-internacional-james-petras-cx36-audios-mp3_rf_10277093_1.html

Efraín Chury Iribarne: Te queríamos pedir un análisis de lo que pasa en EEUU respecto a la próxima elección norteamericana.

JP: Podríamos decir que hay un enorme descontento en el electorado, incluso los partidarios de uno y otro partido; y por esa razón los que no son representantes del establishment –es decir que no simplemente reflejan las ideas e ideologías de las corporaciones dominantes- han conseguido apoyo positivo en las primarias.

Bernie Sanders, auto declarado socialista, está encabezando las primarias en un Estado –New Hampshire- y está a la par de Hillary Clinton que es la favorita de Wall Street y la industria bélica. Y eso es un indicador de que ahora en EEUU no se puede predecir quién va a terminar como candidato.

Donald Trump es otro personaje que ha dado señales populistas atacando la política guerrerista en el exterior, enfatizando el proteccionismo económico y dando vueltas contra la globalización de la economía; más allá del racismo y las políticas anti inmigrantes. Entonces hay algo nuevo en la política norteamericana. Hay posibilidades de que los candidatos tradicionales no consigan las candidaturas de sus partidos.

Pero en el caso de Trump hay un sector del capitalismo que cree que toda la demagogia populista alcanza para conseguir los votos de los boludos, y una vez que gane a Presidencia va a ir hacia la política tradicional de Wall Street. Debemos anotar que los dos estados en juego en esta semana, Iowa y New Hampshire, representan el 1% de lo que podríamos llamar electorado. En otras palabras, es algo indicador pero no mucho.

EChI: Vamos a Venezuela, ¿la derecha se quedó sin repertorio o está en compás de espera?

JP: Obviamente en Venezuela la derecha se está preparando para tomar el poder del Ejecutivo. Están haciendo todo lo posible para derrocar al presidente Maduro y todas las políticas sociales que se han aplicado desde el gobierno. Pero no tienen suficiente fuerza entre sí, en la calle y tampoco en el poder institucional tienen libre paso, porque el Ejército no está dispuesto a apoyar un golpe como en el año 2002. Simplemente podemos afirmar que hay una ofensiva de la derecha, pero aparentemente no tiene suficiente empuje para derrocar al Presidente venezolano.

Ahora, como tocamos este tema de la derecha en América Latina, quiero anotar otra derecha que parece mucho más peligrosa que lo que está ocurriendo en Venezuela, y es la ofensiva de Macri con la purga institucional, el despido de más de 20.000 empleados -técnicos y funcionarios-, el ataque para reivindicar a los militares involucrados en asesinatos y en los 30.000 desaparecidos. Los funcionarios de Macri dicen que los juicios (a los que se sometió a los responsables de violaciones de derechos humanos en Argentina) eran una venganza o en otras palabras que no eran legales. Quieren liberar a los genocidas.

Creo que la violación de la Constitución, junto a otras medidas, realmente son un desmantelamiento de la democracia. Ahora, eso lo anticipamos en otros comentarios; pero esperábamos una resistencia mayor. Obviamente hay una oposición masiva, hay marchas significativas contra Macri, pero la resistencia efectiva todavía es residual, no hay ninguna una ofensiva de resistencia que podría limitar al gobierno al tomar medidas contra la Constitución.

Debemos tratar de entender por qué si hay una oposición masiva la resistencia es tan débil frente a los actos inconstitucionales. Creo que se debe a que durante el periodo de Kirchner, las reformas y las mejoras que consiguieron los trabajadores vinieron de arriba, no vinieron de la lucha, de la movilización de abajo. Entonces, diez años de inmovilidad, diez años de paternalismo, han debilitado la capacidad de las clases populares en Argentina de montar grandes luchas en la actualidad. Va a costar un tiempo, 3 meses, 6 meses, un año.

Mientras tanto, Macri está debilitando las posiciones institucionales y esa es una situación bastante compleja ahora. Hay oposición a gran escala pero con poca potencia y debe surgir algún liderazgo, más allá de los sindicatos que convocan a reuniones de protesta, invitan a bandas de rock, etc. Pero eso no va a tener ningún efecto sobre Macri, porque Macri tiene una visión de poder, una visión de un gobierno bonapartista, dictatorial, y esas medidas parciales –una marcha un día, un paro de empelados públicos por 24 horas, etc.- eso está dentro del esquema de Macri, lo están tomando en cuenta y descontándolo. Y creo que el problema de la izquierda y los movimientos sindicales, es que están acostumbrados a negociar y tranzar con los gobiernos de centro izquierda y no han tenido la capacidad de transferir la lucha anterior a la lucha actual.

EChI: Se anuncia que entre las medidas que lleva adelante Macri, está la restitución del servicio militar obligatorio.

JP: Eso va a movilizar a la juventud, no hay ninguna duda. En EEUU la conscripción obligatoria durante la guerra en Vietnam fue el detonante de la salida de millones de jóvenes a la calle, en el momento que anularon el servicio militar, perdimos el 80 o 90% de la juventud en la lucha.

Entonces, creo que la institución de la conscripción obligatoria va a movilizar a cientos de miles de estudiantes y civiles jóvenes. Ojalá lo aplique porque ese podría ser el detonante entre la juventud que podría tener repercusiones en otros sectores populares.

EChI: Se habla de que estamos ante un nuevo empuje de crisis económica. ¿Es una versión interesada o es un hecho real?

JP: Bueno, debemos empezar diciendo que una encuesta de este fin de semana entre más de cien economistas, ortodoxos en su gran mayoría, indica que más del 50% cree que el 2016 va a ser un año de recesión en EEUU, es decir de crecimiento negativo. Entonces el consenso mayoritario entre los economistas del poder es que  2016 y el 2017 van a ser años de crisis y no crecimiento. Y como EEUU es el principal motor de la economía mundial capitalista, debemos decir que es muy probable una crisis.

Ahora, debemos ser muy cautos en cuanto a la profundidad de la crisis. Pero, crisis si va a haber en el año que vivimos. No hay dudas que esto va a tener repercusiones más allá de una Europa ya estancada, de un Japón en recesión. Debemos anotar que China crece más lentamente que en el pasado. El año 2016 no es un buen año para el capitalismo y sus seguidores en los sindicatos.

Además tenemos las guerras y las protestas populares que empiezan a crecer en otras regiones del mundo, anotando por ejemplo el caso de Haití, donde hay grandes movilizaciones populares contra la ocupación de las fuerzas imperialistas de Naciones Unidas, que incluyen las Fuerzas Armadas vergonzosas de Uruguay. El Uruguay de José Mujica y de Tabaré Vázquez está involucrado en la represión del movimiento democrático en Haití, lo que va a multiplicar los problemas internos en los países participantes en este acto vergonzoso.

EChI: Ya que mencionaste a Mujica, lo vimos reunido en La Habana con dirigentes de las FARC.

JP: Si. Las FARC están en un proceso de negociaciones para terminar la guerra. Ellos exigen un apoyo amplio de partidos de centro, de centro derecha, y cualquier otro que pudiera prestar apoyo a su táctica de entrar en la lucha política. Y Mujica se presta a esta táctica y no le cuesta nada en Uruguay. Porque lo más grave de la política de Mujica es internamente, en el exterior puede ser el progresista que quiera, en Cuba, en Colombia, en cualquier parte del mundo. Es el tipo que llamamos ‘socialista de mil quilómetros’, lo que significa que mil quilómetros afuera de su propio país es muy radical pero adentro… Es como los caramelos, rojos por fuera y por dentro son blancos.

EChI: ¿En qué otros temas estás trabajando?

JP: Hay varios. Primero está la visita de Raúl Castro a Francia, donde Francia está haciendo un gran esfuerzo por desplazar a España como el principal interlocutor europeo en América Latina. Y darle la bienvenida a Raúl Castro es una forma de profundizar las exportaciones y los mercados de Francia. No tiene nada de señal progresista, sino que muestra la competencia de capitales en Europa, tratando también de minimizar la influencia norteamericana. Y Cuba está aprovechando esta táctica de Francia, para mejorar sus condiciones económicas y la condonación de su deuda externa.

Creo que en algún sentido es una manipulación mutua: Cuba busca mejorar sus cuentas externas y diversificar su comercio; y Francia busca penetrar mercados y desplazar sus competidores como España y EEUU.

Otro tema que quiero tocar es el de los Premios Nobel, porque el más fuerte candidato a Nobel de la Paz es Edward Snowden, el que entregó todos los documentos demostrando la política agresiva de EEUU. Es una señal que indica que el mundo está harto de las agresiones norteamericanas. Vamos a ver si Snowden recibe el Nobel de la Paz porque lo merece.

Por otro lado, quiero comentar algo que ya habíamos mencionado, España va a juzgar al ex director del Fondo Monetario Rodrigo Rato, que es un delincuente. Era un dirigente del Partido Popular con Rajoy y es una persona que merece 30 años en la cárcel por las estafas que ha cometido contra pequeños inversionistas.

Finalmente quiero mencionar dos cosas. Una son las conversaciones de paz en Siria. No pueden marchar muy lejos porque mientras hablan de paz, los representantes de la oposición que los países occidentales están apoyando son los grupos terroristas. Los mismos terroristas que ayer, cuando comenzaban las conversaciones, pusieron bombas en Damasco que mataron 60 personas. ¿Cómo puedes tener interlocutores que están poniendo bombas al inicio de las conversaciones de paz? Por eso no creo que avancen mucho.

Por último, quiero anotar una cosa, hay un investigador argentino de nombre Julián Zicari, que ha hecho un estudio sobre el litio. Es un mineral que se utiliza para las baterías de coches, aparatos electrónicos y otras cosas más. El estudio de Zicari indica que el precio en crudo del litio es de entre 45 y 90 dólares, mientras que una batería especial de litio puede venderse entre 10.000 y 40.000 dólares.

Es decir, en los países que tienen control del litio, cuando el Estado tiene control del mineral, podría manufacturar las baterías y podrían multiplicar geométricamente las ganancias y el valor adicional. Por estas razones hablamos del antiimperialismo, de la nacionalización de los minerales, porque podrían pasar de obtener 40 dólares a obtener 40.000 dólares.

Por esa razón Bolivia comenzó a procesar litio y busca coincidir con Argentina y Chile en ese proceso, pero con Macri en el gobierno de Argentina no creo que tenga mucho éxito la conformación de un consorcio de los tres países. Tal vez Bolivia sola podría nacionalizar y producir sus propias baterías. Ojalá Evo Morales esté a la altura.

Extractado por La Haine

 

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