"Cada vez que hay protesta ciudadana, hay multas". Entrevista a algunas de las personas multadas

El pasado 31 de mayo, aprovechando la visita de la presidenta Cospedal a Cuenca, un nutrido grupo de personas trató de acercase a la presidenta para mostrarle su descontento con las políticas de corte neoliberal que está poniendo en práctica desde su gobierno. Estas políticas están teniendo repercusiones muy duras para una creciente mayoría de personas que se están viendo privadas de sus derechos más básicos, entre ellos el de la vivienda.

Entre las personas que trataron de acercarse el pasado día 31 al Auditorio de Cuenca donde se celebraba el acto del Día de la Región, se encontraban simpatizantes o activistas de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. Hablamos con algunos de ellos.

¿Qué ocurrió el pasado 31 de mayo?

Con motivo del día de la Celebración del Día de la Región en Cuenca, personas de diferentes puntos de CLM de forma libre y voluntaria decidimos acercarnos al lugar donde se celebraría el acto institucional para hacer llegar nuestro apoyo a las personas que están siendo desahuciadas y que están sufriendo los embites de las sociedades financieras.

Acudimos con camisetas reivindicativas de "STOP DESAHUCIOS" y "SÍ SE PUEDE" y quizás por eso algunas de nosotras fuimos identificadas mucho antes de llegar al lugar en el que se celebraba el acto. Se nos identificó en la calle Aguirre, a las nueve y media de la mañana. De esta primera identificación es de donde salen casi todas las multas.

Estaríamos alrededor de unas doscientas personas, y en ningún momento la policía nos dijo que teníamos que marcharnos porque era una concentración no autorizada. La policía nos reconoció nuestro derecho a estar allí, y en ningún momento hubo peligro para la gente que estaba allí congregada. Había personas de todas las edades y de toda Castilla-la Mancha, había niños, adultos, personas mayores y en ningún momento la policía nos dijo que tuviéramos que desalojar.

¿Cómo es la notificación de la multa?

La multa la firma el Subdelegado del Gobierno, Ángel Luis Mariscal Estrada, tras la información que le aporta el comisario de Cuenca a partir de las testificaciones policiales. Aunque en ningún lugar aparecen los nombres de los policías que se supone han testificado.

¿De qué se os acusa, por qué razón se os pone una multa?

De no querer abandonar el lugar de la concentración. Pero claro, nosotros tratamos de acercarnos a Cospedal para comunicarle el sentir general, cosa que fue imposible debido al propio cordón policial que es el que provocó que nos concentráramos en un determinado lugar. También hay una multa por insultos a un policía, que no se dieron. Entre otras cosas porque, lógicamente, no nos vamos a poner a insultar a la policía sabiendo las consecuencias que eso puede tener...

¿Cómo se ha posicionado la PAH de Cuenca?

Tenemos el apoyo de la Plataforma. Está previsto plantear actividades para recaudar fondos de apoyo a personas multadas. Sabemos que cada vez que hay protesta ciudadana hay multas y sabemos que cualquier persona que vayamos a una manifestación o una acción que disguste a nuestros políticos podemos ser multados. De ahí que el apoyo mutuo es algo básico e imprescindible.

Hay quien no formaba parte de la PAH y se acercó a protestar...

Sí, lo cierto es que esto es algo que está ocurriendo en todas partes. Allá donde van los políticos la gente trata de acercarse para protestar y manifestar su malestar. Hay mucha gente que está hasta las narices. Hace cuatro días fue Cospedal a Motilla y se allí se acercó gente de todos los pueblos de alrededor para mostrarle con claridad su descontento.

En cuanto a la libertad de expresión, considero que el propio cordón policial atenta contra ella al no permitir a la gente que se acerque lo más mínimo a la persona a la que van dirigidos los mensajes. Es más bien un perímetro antiprotesta, aquí había casi 1 Km entre Cospedal y nosotros. Además a la gente que pasaba "bien vestida" no se le pedía ni el carnet ni nada y se le dejaba atravesarlo sin más. Así es que no es un perímetro de seguridad sino un perímetro que tiene como finalidad acallar la protesta.