El bloque burgués (CC-PP-PSOE) aprovecha para negar la nación canaria

Aprovechando la reaccionaria sentencia del Tribunal Constitucional español que niega la existencia de cualquier nación que no sea la “nación española”, los tres partidos del bloque burgués en Canarias (CC, PP y PSOE) se han lanzado a deshacerse de la molesta realidad de la Nación Canaria y apuntarse a las tesis del imperialismo español, facilitando así una reforma del Estatuto de Autonomía adaptada al centralismo borbónico.

Por boca de su portavoz parlamentario, José Miguel Barragán, Coalición Canaria asegura aliviada que “es más importante conseguir un mayor autogobierno en la futura reforma que introducir un término sin validez jurídica”. Eso sí, “CC sigue defendiendo que Canarias es una nación“, pero sólo para congresos internos y romerías.

Por su parte, la franquicia del PSOE en nuestro país no quiere reconocer la realidad canaria ni siquiera de forma simbólica en el preámbulo, en las condiciones de nulidad jurídica impuestas por el Tribunal Constitucional. Lo ha explicado Santiago Pérez, que marca la posición psoeísta diciendo que el TC “ha definido las líneas rojas” de las futuras reformas estatutarias, por lo que “no se pueden traspasar las mismas sin vulnerar la Constitución”. Por si quedaba alguna duda: “No somos partidarios de introducir en el Estatuto conceptos que tienen una gran carga ideológica y provocan un gran debate.”

Ya se sabe lo peligroso que es que el pueblo debata. Se le pueden ocurrir ideas “inconvenientes” y, lo que es peor, llevarlas a la práctica.

Ni que decir tiene que la franquicia del PP en las Islas está de enhorabuena. En palabras de su Secretario General, Manuel Fernández, “después de la sentencia, no se puede intentar ir más allá de lo que ha dicho el Constitucional, ya está todo concretado, ya hay una interpretación clara y no hay que seguir jugando con las palabras.”

Los representantes de la oligarquía imperialista española y de la burguesía dependiente canaria vuelven a coincidir, como han hecho históricamente, en la supuesta “españolidad” de Canarias y en la “indisoluble unidad de la nación española”, garantía de mantener su posición de clase dominante y poder seguir explotando a nuestro pueblo.

Una vez más la cosa queda clara: sólo la clase obrera canaria -y su vanguardia comunista- está en condiciones de convertirse en clase nacional en Canarias, y llevar a nuestra patria al futuro, a la República Socialista Canaria y a la independencia nacional.