Ellos sabrán por qué

Toda nuestra solidaridad y apoyo a la familia de Francisco Javier Romero Taboada "Jimmy", asesinado a manos de una banda fascista madrileña porque era un "puto gallego", como Aitor Zabaleta (asesinado por los mismos hace años) era un "puto vasco".

"Tenia antecedentes penales". "Tenía la edad mental de un niño de doce años". "No merece un minuto de silencio". Todo vale para determinados periodistas deportivos y generalistas, en su afán por demonizar a un asesinado por bandas fascistas "cívico-deportivas" que han hecho de Madrid, con la connivencia de muchos, su feudo impune. 

Que Francisco Javier estuviera alguna vez en prisión (ignoramos si es cierto y las causas pero no son objeto de este escrito) no implica evitar decir que en el momento de ser asesinado no le debía al régimen "ni un tantito así ¡nada!", que diría el Ché, pues de no haber sido así, nunca habría podido estar en Madrid. 

Esos mismos periodistas pontifican en ocasiones que las cárceles están para redimir a los condenados, para reinsertarlos; sin embargo con esta brutal campaña de desprestigio contra un muerto, parece como si amaran el delito y más aún al delincuente, en especial si éste es nazi ¿Cómo van a ser iguales quienes gritan consignas hitlerianas y quienes gritan consignas contra los desahucios que hacen que la gente se arroje al vacío desde un sexto piso? 

¿Cómo puede sorprendernos que familiares de la víctima salgan fuera de un coche para agredir a unas hienas morbosas que los filman en momentos de gran dolor y tras haber oído atrocidades sobre el fallecido? Menos nos extraña la actitud igualmente violenta, rabiosa, casi xenófoba, de la Policía sacándolos del automóvil "¡Abre las puertas del coche de una puta vez!", grita la fiera, amparada en uniforme azul, porra en alto, gesto desafiante. Clarificador.

Matan a un familiar y determinados elementos (hay excepciones como es natural) se burlan de él, lo difaman, lo presentan como un monstruo descerebrado y mienten como bellacos en la mayoría de sus "denuncias", mientras los nazis salen libres, con "cargos" y hasta la próxima. 

Desde este blog animamos a los familiares del desaparecido Jimmy a que inicien medidas legales por lo civil y lo criminal, nunca mejor dicho por desgracia, contra toda la gentuza que se ha revolcado en un charco de sangre haciendo de la víctima el verdugo, en su afán- ellos sabrán sus motivos-, por dulcificar un execrable crimen.  Que tomen ejemplo de los deudos y amigos (200 personas) que han enterrado a Jimmy en medio de un profundo silencio, sin alharacas, sin alaridos, sin despropósitos.