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Tras un verano devastador la marcha negra de lxs bomberxs forestales vuelve a ensordecer Zaragoza
Este sábado cientos de personas acompañaron a las plantillas de los operativos de incendios forestales para denunciar la falta de inversión en los trabajos preventivos
Tras un verano devastador la marcha negra de las bomberas y bomberos forestales vuelve a ensordecer Zaragoza
Este sábado cientos de personas acompañaron a las plantillas de los operativos de incendios forestales para denunciar la falta de inversión en los trabajos preventivos, en la profesionalización del servicio y en sus propias condiciones laborales
Este sábado por la noche las motosierras y los batefuegos de las bomberas y los bomberos forestales ensordecieron las calles de Zaragoza. Cientos de personas arroparon a las plantillas de extinción de incendios forestales para denunciar la precariedad que año tras año las acompaña en sus labores.
Las secciones sindicales de la CGT en las empresas públicas de SARGA y TRAGSA denunciaban así la falta de empatía e inacción “de la clase política, la administración y las empresas de quienes dependen” tras un verano devastador en cuanto a incendios forestales.
Este año 2022, tanto Aragón como el Estado español, han sufrido las terribles consecuencias que dejan los incendios forestales. Montes calcinados, cosechas perdidas, pueblos desalojados e incluso seriamente afectados, fauna desplazada.
“Llevamos años denunciando la precariedad de los operativos de extinción tanto en medios humanos como materiales, la falta de inversión en trabajos preventivos y en medios de extinción más formados y profesionalizados, una gestión forestal responsable de nuestros montes y año tras año, promesa tras promesa, se sigue sin hacer nada al respecto”, denuncian desde el sindicato.
Marcha negra. Foto: CGT.
Los bomberos y las bomberas forestales manifiestan día sí día también que siguen arrastrando problemas históricos y que la falta de voluntad política hace difícil avanzar en derechos en este colectivo que, como señalan, “se ha dejado la piel en el terreno, pero solo recibe promesas que se incumplen una vez llegado el invierno”.
De hecho, durante esta marcha negra el ruido de los batefuegos y las motosierras paró durante un minuto en homenaje a las bomberas y bomberos fallecidos durante la realización de su trabajo. También ha sido especialmente emotivo el aplauso recibido de parte de la ciudadanía aragonesa en la calle Alfonso.
“Olona despierta, el fuego está en tu puerta”
Este ha sido uno de los gritos de la noche, un toque de atención al consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón y responsable último de los operativos de extinción de incendios.
Las secciones sindicales de la CGT en las empresas públicas SARGA y TRAGSA recuerdan que “nos siguen sin ser reconocidas las enfermedades laborales derivadas de la toxicidad, peligrosidad y penosidad, que asumimos en nuestro trabajo”. Pero también exigen “una segunda actividad para cuando el físico no esté para estar en primera línea combatiendo el fuego, así como los coeficientes reductores que regularían nuestra edad de jubilación”.
Pese a que la virulencia de los incendios parece aumentar cada año, estas plantillas advierten de que no tienen una formación adecuada acorde a sus funciones que profesionalice el servicio, así como tampoco cuentan con centros de trabajo dignos.
Además, en el caso del dispositivo gestionado por SARGA y dependiente del Gobierno de Aragón, todavía no se les ha reconocido la categoría profesional “para que se nos reconozca como lo que realmente somos, bomberos y bomberas forestales”, lamentan desde CGT.
Foto: Iker G. Izagirre.
Y añaden que siguen con porcentajes de contratación inferiores al 100%, y en el caso de los puestos fijos de vigilancia, con tiempos de contratación muy precarios, de tan sólo tres meses en la mayoría de los casos, “condiciones que se alejan de un empleo digno”.
Por todo lo anterior, estas secciones sindicales de CGT exigen que las declaraciones y promesas políticas hechas durante todos estos años, durante los grandes incendios forestales, emergencias rurales y medioambientales que han asolado Aragón, se doten de contenido y presupuesto y, apuntan: “Dejen de ser reclamos veraniegos para manipular la opinión pública dando a entender que la clase política entiende y atiende nuestras reivindicaciones, por que demuestran que no es así”.
Las bomberas y bomberos forestales reclaman que es el momento de apostar por este colectivo esencial con medidas directas, decididas y que solucionen problemas laborales que arrastran desde hace años.
"No olvidar que este paisaje antes era verde"
Estas plantillas también se han acordado de la población que habita los pueblos afectados por los incendios: “Que se revise la actual gestión forestal para garantizar los derechos de los habitantes de las zonas rurales, tan desprotegidos por la política actual, y que las situaciones evitables de este verano, bañado en ceniza y lágrimas, no se vuelvan a repetir”.
En este sentido durante la manifestación vecinos y vecinas de municipios afectados por incendios, organizados en plataformas, leyeron un comunicado. "No olvidar que este paisaje antes era verde", reclamaban durante la lectura las vecinas y vecinos de Ateca, Terrer, Embid de Ariza, Cetina, Bubierca, Contamina, Villarroya de la Sierra y Villalengua.
Las bomberas y bomberos forestales explican a AraInfo que esta ha sido la séptima Marcha Negra y aunque esperan que sea la última, saben que en octubre del próximo año tendrán que volver a las calles.
