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Declaración del Movimiento Octubre sobre la lucha de los ferroviarios tercerizados
Capital Federal (Agencia Paco Urondo) Este 23 de diciembre, a partir del mediodía y durante siete largas horas, un grupo de trabajadores tercerizados del Roca, apoyados por militantes del PO, cortaron las vías del ferrocarril impidiendo la salida de 25 formaciones. Decenas de miles de ciudadanas y ciudadanos se vieron impedidos de viajar. Trabajadores que regresaban a sus hogares. Familias que volvían a sus domicilios con las compras de navidad.
La causa de los tercerizados, que luchan por la reincorporación de los despedidos y por el pase a planta, cuenta con el apoyo de todos los que militamos por un país socialmente justo, económicamente libre y políticamente soberano.
El gobierno de Cristina Fernández, que mantiene y profundiza el rumbo iniciado por Néstor Kirchner, generador de cinco millones de nuevos puestos de trabajo, se pronunció de manera clara a favor de las demandas de los trabajadores tercerizados. La gestión del ministro Carlos Tomada ayudó al pase a planta y la reincorporación de centenares de trabajadores del Roca.
Marcelo Ramal, dirigente del PO, declaró ayer: “Hicimos una protesta pacífica, no tenemos nada que ver con lo que ocurrió en Constitución. Ahí había gente descontenta, pero los disturbios parecían armados”.
¡Marcelo Ramal acaba de enterarse que existe Duhalde! ¿Es ingenuo o es un títere? De cualquier manera, su actitud es indigna de un dirigente político que pretende hablar en nombre de los trabajadores. Con una medida de lucha extrema (en el marco de una negociación que, aún con no pocas dificultades por vencer, está dando resultados favorables para los tercerizados), el PO provocó el descontento de miles de personas agolpadas en la estación Constitución. Se la dejó servida a los Duhalde para que, con una patota mínima de provocadores con mochilas llenas de piedras, generaran el caos. El mismo caos con el que vienen amenazando a modo de profecía autocumplida, porque no confían en contar con el voto ciudadano. El mismo caos que les sirve para reinstalar el discurso de la mano dura y la exigencia de represión a la protesta social.
La causa de los trabajadores tercerizados es justa, pero el método, por el momento elegido, es inoportuno. También es inapropiado. Cuando siguen abiertas las negociaciones con la patronal, se tiene el apoyo del gobierno nacional y se están obteniendo resultados parciales, utilizar un método extremo de lucha, que toma de rehenes a decenas de miles de ciudadanos concentrados en un espacio público relativamente reducido, es de por sí inapropiado y resulta absolutamente funcional a quienes, desde la derecha más retrógrada –esa que dice “a Cristina la bajamos por nockout o por abandono”-, impulsan un clima decididamente destituyente.
Este es el camino y no otro, poner visible los problemas es entendible, posible y necesario para transformarlos en triunfos. Otra cosa es desligarlos del contexto, de las circunstancias que lo rodean, del real nivel de la lucha social en la argentina de hoy.
¡A igual trabajo, igual salario e iguales condiciones laborales! No a la superexplotación de los tercerizados. Reincorporación de los despedidos. Pase a planta de los trabajadores tercerizados.
¡Basta de violencia provocada por la derecha argentina y de infantilismo de izquierda liberal que favorece a los planes destituyentes de la oligarquía!
¡Por una más justa distribución de la riqueza y una mayor democratización de la sociedad y las instituciones, firme apoyo al gobierno de Cristina Fernández y a la profundización del proyecto nacional y popular!
Más información: 0221155220383 (Agencia Paco Urondo)
