Martín Insaurralde, Ricardo Fort y la plata de la política

Dejándole la mesa servida a Javier Milei, que acusa a la casta política como principal responsable de los males de nuestro país, Martín Insaurralde, jefe de gabinete de la Provincia de Buenos Aires, fue noticia por un escándalo mediático promocionado por la modelo Sofía Clerici.

Como si fuera una operación montada en dos tiempos, a mediados de setiembre fue detenido Julio Segundo Rigaut, en un cajero automático de la ciudad de La Plata. Tenía en su poder 48 tarjetas de débito, que pertenecían a empleados de la legislatura bonaerense. Rigaut, conocido como “Chocolate” es un puntero del Partido Justicialista y habría retirado hasta el momento que fue detenido, la cantidad de $1.257.000 en efectivo, utilizando el límite diario de $ 30.000. Según informó la policía se le encontraron tickets que demostraron que estas extracciones masivas eran habituales.

Quienes conocen el manejo de las cámaras legislativas de la Provincia de Buenos Aires, comentaron que lo que salió a la luz con la detención de “Chocolate” es una vieja práctica de la política que abarca a la casi totalidad de los partidos. Cada diputado provincial cuenta con 40 cargos que reparte discrecionalmente, entre militantes, amigxs y personas de su confianza. Quienes reciben esos puestos entregan una parte importante de sus salarios para que ingrese a la caja de la política que maneja cada legislador. También hay un porcentaje que ingresa a las autoridades legislativas del Partido. Lo ocurrido con Rigaut, sólo podía explicarse como una operación política y una ruptura del código de convivencia entre quienes son partes del congreso provincial. De todas maneras, quienes trataron de seguir la trama de las tropelías de “Chocolate” terminaron apuntando contra el Presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires, Federico Otermin, y actual candidato a Intendente de Lomas de Zamora, que es la mano derecha de Martín Insaurralde.

Unas semanas antes, la difusión de otra noticia, conducía las aguas de la atención pública al mismo lugar. Se trató de la mediática separación del Jefe de Gabinete de la Provincia de Buenos Aires, Martín Insaurralde, de la modelo y bailarina Jessica Cirio. El matrimonio duró 9 años y tienen una hija en común. Sorprendió que la mujer pidió para llegar a un acuerdo de divorcio, la cantidad de 50 millones de dólares. Esta cifra no se corresponde con los ingresos legales de una persona que ha sido funcionario público durante el período que duró el matrimonio. Al final arreglaron por 20 millones de dólares.

Un día antes del debate presidencial, y cuando buena parte de nuestra población está pendiente de la política, la modelo 'hot' Sofía Clerici difundió revelaciones que causaron revuelo. Mostró que quién la había invitado a unas vacaciones a Marbella, donde contrataron un lujoso yate, y le regaló un reloj Rolex de oro, fue el político Martín Insaurralde. El jefe de gabinete de Axel Kicillof, volvía a la primera plana de los medios, con fotos y videos muy sugerentes que se hicieron virales.

El origen de las grandes fortunas de la Argentina no está en el ejercicio de la política. Proviene del saqueo sistemático de nuestros bienes naturales, de las contrataciones amañadas con el Estado, de operaciones mafiosas de exportaciones e importaciones, y de la explotación de lxs trabajadorxs. Las multinacionales y los grandes empresarios acumulan mucho más dinero que los políticos en general, pero estos quedan mucho más expuestos. Por eso, cuando se sorprende a un político robando o exhibiendo un modo de vida muy por encima de lo que podría sostener con sus sueldos de funcionario, genera mucho malestar social. En este caso, en plena campaña electoral, donde todos los candidatos manifiestan su voluntad por erradicar la pobreza, resulta muy “desprolijo” descubrir que un alto funcionario anda dilapidando dinero en una selecta playa europea.

Parece hecho a propósito para reforzar el mensaje de Javier Milei, que acusando a la “casta política”, exime a todos los saqueadores, mafiosos, contrabandistas y explotadores. Cuando ocurren estas cosas queda la duda si tanta grosería expuesta es producto sólo del ejercicio habitual de la impunidad, o se agregaron vulgares operaciones políticas contra funcionarios, cuya única viveza es perjudicar a lxs que menos tienen. Por las dudas, Insaurralde ya presentó su renuncia, que le fue aceptada de inmediato.

El fallecido empresario Ricard Fort, promovía y disfrutaba de los escándalos mediáticos que protagonizaba. Aunque hay que reconocer, que sus payasadas eran mucho más inocentes que las del político que alguna vez fue promocionado para ser candidato a gobernador de Buenos Aires.

Fruto de la imaginación que a veces circula por las redes sociales, se ha vinculado a estos dos personajes en un chiste. Se está viralizando que a Martín Insaurralde, ahora lo han bautizado “Ricardo Fort”: “porque vive del Chocolate”.

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